No todos los sacerdotes suelen ser hombres de edad avanzada con físico poco trabajados, existen excepciones, por ejemplo en Suecia cuentan con un sacerdote luterano que en su tiempo libre practica crossfit y fue gracias a que comparte sus rutinas en Instragram que se hizo viral y podríamos pensar que también se volvió un ejemplo a seguir.
Con la frase de la biblia “el cuerpo es un templo” el usuario de la cuenta de Instagram @crossfitpriest comparta sus rutinas de ejercicio en su tiempo libre, cuando no está trabajando en un hospital de Uppsala, que se ubica al norte de la capital Estocolmo.
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Por si fuera poco, el pastor luterano tiene esposa y dos hijos, otras de las muchas excusas que ponemos para alegar que no tenemos tiempo para ejercitarnos, para él son una motivación más en su carrera como instagramer en el extenso mundo del crossfit.
Además tiene otra cuenta en Instagram que se llama @fortroligtpodden en la que presenta un podcast referente a las reflexiones existenciales y los desafíos cotidianos que enfrentamos las personas diariamente.
¿Qué podemos ver en la cuenta de Instagram del sacerdote que practica crossfit?
Entre los reels y publicaciones que postea Oskar Arngården a sus 38 años de edad graba los momento en los que se encuentra en el gimnasio practicando rutinas de ejercicio, desde las pesas rusas hasta rutinas con su propio peso, con la idea de promover la actividad física entre los feligreses, podríamos decir de su ciudad, pero ya al contar con redes sociales, su mensaje llega a más personas.
Pero no sólo son rutinas de ejercicio, también sube mensajes con la idea de alentar a sus seguidores, por ejemplo, en uno de sus más recientes post te invita a pensar en tus metas del año nuevo, cómo lograrlas y no quedarte sin comenzar una vida saludable.
¿Por qué ocupar las redes sociales? Oskar Arngården opina que son el lugar ideal para interactuar con todo el mundo y enviar mensajes no sólo de rutinas de ejercicio, también de apoyo para los que lo necesitar.
”Dios forma parte de todos los aspectos de mi vida. Cuando hago pesas, (...) en cierta forma es una oración divina. La fe siempre me acompaña, haga lo que haga. No puedo separarla del resto de mi vida”, comentó.
