Son pocos los mexicanos que llegan a una edad avanzada y tienen los recursos para ser empleadores, sólo 8.9% y el 3.9% no percibe remuneración por su trabajo, señalan estadísticas del INEGI, dadas a conocer por Día Internacional de las Personas de Edad (Adultos Mayores).
Las cifras muestran que hay diferencias muy importantes por sexo: el porcentaje de empleadores varones es de 10.8%, lo que representa el doble que en mujeres que sólo lo logran 5%. Mientras que en los trabajadores no remunerados las mujeres representan 8.4% y los hombres 1.8%.
Los números obtenidos de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE) indica que la mayoría de la población ocupada de 60 años o más labora por cuenta propia (49.6%), seguidos por los trabajadores subordinados y remunerados con 37.6%.
En lo que se refiere a las características de la población ocupada, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) argumenta que la mayor parte de las actividades generadoras de ingreso de las personas de edad son las que provienen del trabajo por cuenta propia.
Agrega que “esto puede ser consecuencia tanto de la discriminación que obstaculiza el acceso por parte de las personas mayores a un empleo asalariado, como del deseo de estas personas de trabajar de manera independiente, aprovechando las cualificaciones adquiridas a lo largo de su vida laboral para hacerlo en condiciones que permitan una mayor flexibilidad a la hora de organizar sus actividades laborales y de la vida diaria”.
El estudio muestra que hasta el segundo trimestre de 2018, el porcentaje de Población Económicamente Activa (PEA) de 60 años o más es de 34.1%, de los cuales casi la mitad trabaja por cuenta propia y su ingreso es el más bajo comparado con otros grupos de edad.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía informó que del universo de cinco millones 120 mil 459 personas de 60 años y más, la población ocupada representa 98.9% y 1.1% restante son personas de edad que buscan trabajo.
Asimismo, señala que conforme se incrementa la edad, el porcentaje de la PEA disminuye de 48.4%, entre la población de 60 a 64 años, a 16.5% en los que tienen 75 años o más.
Además la información de la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo muestra que la mayoría de la población ocupada de 60 años o más labora por cuenta propia (49.6%), seguida por los trabajadores subordinados y remunerados (37.6%).
Esto origina que sean pocos los que llegan a una edad avanzada y tienen los recursos para ser empleadores.
Por ejemplo, es el grupo que tiene el menor porcentaje de trabajadores con prestaciones (50%), el más bajo con acceso a los servicios de salud (38%) y con contrato laboral (38.6%).
En lo que se refiere al tipo de ocupación, 21.3% de la población ocupada de 60 años o más se dedica a actividades elementales y de apoyo, 20.8% son trabajadores agropecuarios y 15.2% comerciantes, empleados y agentes en ventas.
Expone que son pocos los trabajadores dedicados a actividades administrativas (2.7%) o son funcionarios, directores o jefes (2.8%).
En el país la población ocupada de 60 años o más es la que muestra menor nivel educativo, 42.3% tiene primaria incompleta y sólo 15.4% cuenta con educación media superior y superior.
PÉSIMAS CONDICIONES
Las condiciones laborales de las personas de edad que se ocupan de manera subordinada y remunerada son más desfavorables respecto a otros grupos de edad.
