La nueva economía basada en servicios digitales es una hoja en blanco en la que un grupo de amigos puede formar un imperio corporativo de la nada, romper esquemas y poner de cabeza a los sectores tradicionales; pero una buena idea no basta, hay que tropezar y aprender a levantarse.
"Fallar rápido creo que es clave, sabíamos que íbamos a equivocarnos, pero hacerlo rápido era muy importante. Puedo lanzar una campaña, puede ser equivocado el enfoque que yo le dé, pero rápidamente pruebo otra cosa, valido y sigo creciendo", platica Áaron Rodriguez, director de marketing y socio fundador de una de las empresas tecnológicas estrella de España, Mr Jeff.
Fundada en 2015 por los veinteañeros Eloi Gómez, Adrián Moreno y Rubén Muñoz, el concepto de Mr Jeff es sencillo, como el de casi todas las empresas de tecnología que están cambiando el rostro del mundo. A través de la app de Mr Jeff los usuarios solicitan a la hora que quieran el lavado y planchado de sus prendas, que serán recogidas y entregadas a domicilio mediante el pago de una membresía.
Del otro lado, los franquiciatarios de Mr Jeff cuentan con un sistema que les permite organizar los pedidos, trazar el estado de cada prenda y organizar las rutas de entrega. Además, la tecnología que provee la empresa asegura a las lavanderías asociadas la demanda dentro del cuadrante donde están ubicadas.
"Somos lavanderías con puntos físicos, pero la parte tecnológica cambia por completo sectores tradicionales donde la tecnología influye y se mejoran procesos de forma considerable", platica Rodriguez.
El sólido modelo de Mr Jeff le ha valido ser un éxito en España, donde ha logrado captar del público inversionista 48 millones de pesos mexicanos en dos rondas de financiamiento y sus usuarios se contabilizan en miles. Sobre Mr Jeff, la prensa española ha referido que pasó "de app para vagos a franquicia global".
Pero no llegó a este punto de la nada. A tres años de su creación en Valencia, España, la empresa ha tenido que hacer cambios fundamentales a su modelo de negocios.
Antes de 2017 Mr Jeff era una app que direccionaba la demanda de gente con ropa para lavar hacia establecimientos grandes y pequeños. Las nuevas empresas tecnológicas apuestan por un modelo con inversión física cero, pero Mr Jeff tuvo que establecer puntos físicos que pudieran procesar la demanda. Y lo hizo migrando a un modelo de franquicia.
"Nos dimos cuenta que no había problemas de demanda, mucha gente quería su ropa lavada y planchada, el problema es que los centros que había en España no estaban preparados para trabajar con esos volúmenes y así no puedes escalar.
"Cosas que nosotros pensábamos que iban a ser y luego no pasaron: cuando lanzamos el servicio en España pensábamos que la recurrencia de limpieza de un saco o un traje iba a ser mensual, que la persona iba a venir todos los meses a limpiar con nosotros, pero lo que nos dimos cuenta con las métricas es que eso no era así, que era algo más puntual de tres, seis meses, por lo tanto nuestras estimaciones a nivel cifras no eran correctas. Es ahí cuando cambiamos de un enfoque de tintorería a uno de lavandería y donde vamos a un modelo de membresía", recuerda.
Ya bajo un modelo de franquicias, que traslada la responsabilidad de inversión hacia el franquiciatario, pero que le asegura a Mr Jeff la calidad y capacidad de sus procesos, es como la empresa tuvo la fórmula para salir de los callejones de Madrid y Barcelona para llegar a México a lavar las camisas y corbatas de Santa Fe y La Condesa.
LA ROPA SUCIA SE LAVA EN LATAM
Entre los inversionistas ángeles de Mr Jeff se encuentran Albert Amengol, co-fundador de Doctoralia, y Álvaro Gómez-Trénor, vicepresidente de Coca Cola en España, quienes han apadrinado con su experiencia internacional a los jóvenes.
De esta experiencia Mr Jeff entendió que la clave del modelo de los negocios tecnológicos es la retención de su partners, que estén contentos, respaldados por la marca y con buenos dividendos, a diferencia de lo ocurrido por ejemplo en plataformas como Uber, que "ha tenido un crecimiento muy grande, pero no ha sabido cuidar a sus conductores. Eso es un problema muy grande, porque ellos son tu oferta".
"Metimos a personas que aparte del dinero nos podían aportar conocimientos y experiencias de cómo llevar la compañía a otro nivel. Somos muy jóvenes y nos estamos expandiendo a otros países, pero no teníamos ni idea de cómo hacerlo. Nos ha ayudado a no tener miedo y vergüenza de preguntarle a personas que ya lo hayan logrado", dice Rodriguez.
Y en esas ambiciones, las de ser globales, México representa la puerta de entrada para toda Latinoamérica.
Según métricas de la empresa, 75% de los mexicanos considera el lavado y el planchado como las más desagradables, e incluso 40% de las parejas entrevistadas admitió que ambas actividades están entre los principales motivos de discusión.
"Viendo lo barato que es el servicio doméstico en México y cuánta gente lo tiene teníamos el miedo de que no fuera a funcionar, pero lo que nos hemos dado cuenta es que las nuevas generaciones no quieren tener una persona en casa lavando. En México hemos visto muchísima demanda, la gente es mucho más receptiva", platica.
Al momento, Mr Jeff ya tiene 10 centros de lavado franquiciados en operación en México, pero cuenta con otros 120 ya confirmados y próximos a abrir en Ciudad de México, Puebla, Querétaro, Jalisco, Nuevo León. Cada mes se cierran tratos de 30 nuevas franquicias y se abre una.
"Nuestro objetivo es crear una nueva categoría. Es decir, el tipo de usuario que utiliza la membresía es por lo general uno que nunca había utilizado la lavandería, un usuario que para él es algo nuevo.
"No nos estamos enfocando en un usuario tradicional, sino buscamos un usuario millenial, joven, que valora su tiempo, que lo quiere utilizar para desarrollarse profesionalmente o para su vida personal y que no se quiere dedicar a lavar y planchar, uno que ya paga Netflix, Rappi o Spotify", dice Rodriguez.
El éxito en México –añade– ha sido el trampolín para tener acuerdos para la apertura próxima de 70 franquicias en Colombia y Perú; próximamente comenzarán tratos en Argentina y Chile.
"Estamos viendo casos de boca a boca en que lo prueba el joven y se lo cuenta a la madre y se amplía el rango porque ven que es algo muy bueno. Creo que el crecimiento para México va a ser muy agresivo y el objetivo es abrir todo Latinoamérica", dice Áaron Rodriguez confiado y sonriente, con sólo 26 años a cuestas.