El aumento en el precio nacional del azúcar se debe a una burbuja especulativa derivada del fin de la cosecha de caña, conflictos políticos internacionales y un aumento en los intermediarios, afirmó Humberto Jasso Torres, presidente de la Cámara Nacional de las Industrias Azucarera y Alcoholera (CNIAA).
“Hay un incremento de precios injustificado en el precio por especulaciones, ya que en México hay suficiente azúcar para cubrir las necesidades de consumo en el país”, dijo Jasso en conferencia de prensa.
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Según registros del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y la Secretaría de Economía (SE), el precio del kilogramo de azúcar ha aumentado más de 30 por ciento en comparación con el mismo periodo de 2022, marcando su mayor incremento desde 2016.
No obstante, la CNIAA ha identificado un aumento en los últimos días de hasta 50 por ciento. Jasso señaló que, a pesar de noticias internacionales que indican una disminución en la producción de los principales exportadores de azúcar, en México “no existen elementos para concluir objetivamente que hay desabasto”.
“Seguimos siendo un productor excedentario de azúcar; las importaciones de fructosa de maíz han aumentado 14 por ciento en nuestro país en este ciclo, y además, en el ciclo recién cerrado, se importaron más de 260 mil toneladas de azúcar en nuestro país, lo cual asegura un nivel de abastecimiento en el mercado que no justifica compras especulativas”, agregó Jasso Torres.
México cuenta con 15 estados productores de azúcar, aunque 40 por ciento proviene de Veracruz. Las principales industrias consumidoras incluyen la refresquera, líder a pesar del declive en el uso de azúcar frente a la fructosa, la industria panificadora y la empresa de confitería.
Según cifras del Comité Nacional para el Desarrollo Sustentable de la Caña de Azúcar (Conadesuca), la producción anual de azúcar ha disminuido 16 por ciento en comparación con el periodo anterior, y el consumo nacional ha bajado cinco por ciento, situándose en solo 3.9 millones de toneladas, cifras similares a las registradas durante la pandemia.
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Para abordar la especulación, la CNIAA anunció que colaborará con la Condesuca y el sector cañero para adelantar la cosecha de 2024 y proveer al mercado con azúcar nueva.
“Esto contribuirá a enfrentar la burbuja especulativa en las cotizaciones de azúcar en las centrales de abastos, las cuales han alcanzado niveles injustificados e irreales”, concluyó.