Empresarios del país proponen al presidente Andrés Manuel López Obrador retomar la construcción del segundo piso de Indios Verdes a la caseta de la México-Pachuca, un proyecto licitado durante la administración pasada, pero que fue suspendido.
El viaducto es uno de los 61 proyectos incluidos en el Acuerdo Nacional de Inversión en Infraestructura con el Sector Privado, que presentará el presidente Andrés Manuel López Obrador este martes.
La obra al norte de la Ciudad de México requerirá una inversión de cuatro mil 400 millones de pesos.
Según el proyecto que presentarán mañana el Presidente y los líderes empresariales, el inicio de la construcción de este segundo piso está previsto para 2020, pues sólo hace falta la liberación de derechos de vía en el entronque Indios Verdes, así como la aprobación del Proyecto Ejecutivo por parte del Gobierno de la Ciudad de México, encabezado por Claudia Sheinbaum.
La construcción de un segundo piso de 9.7 kilómetros en uno de los tramos de mayor afluencia en la zona centro del país ya se había planteado, incluso licitado, pero fue suspendido a finales de 2016.
Ese año, Concesionaria Viaducto Indios Verdes (Convive), un consorcio integrado por la empresa GMB Infraestructura Carretera, y Promotora y Operadora de Infraestructura (Pinfra), del empresario David Peñaloza Alanís, celebró un contrato de asociación público privada bajo un esquema autofinanciable, es decir, con las cuotas que se cobrarían a los automovilistas por usar la vialidad elevada.
El título de concesión para la operadora de carreteras fue por 30 años para su construcción, operación, explotación, conservación y mantenimiento.
El proyecto ejecutivo de la vía se calculó entonces con un costo de cinco mil 424 millones de pesos.
El proyecto fue rechazado por la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) debido a que Convive) carecía de estudios para demostrar que el desarrollo no causaría impactos graves al ambiente en esa zona del Valle de México.
En el proyecto de Convive, la Semarnat determinó además que el beneficio para la movilidad urbana sólo sería por entre tres y siete años, pero que a largo plazo no representaba una solución integral para la movilidad de la zona por no vincularse con otras modalidades de transporte público.
Ahora, este segundo piso tiene una segunda oportunidad como parte de un paquete carretero incluido en el plan de infraestructura que considera inversiones en este rubro por 17 mil millones de pesos, a partir de 2020.
DE CANCÚN A TULUM
Otro de los proyectos carreteros que se propone desarrollar el sector privado es la ampliación, mantenimiento y conservación del tramo Carretero Tulum-Cancún, en el Caribe mexicano.
Esta obra, que tendrá un costo de tres mil 500 millones de pesos, se realizará para fortalecer la conectividad en la región y mejorar los tiempos de viaje y niveles de servicio al aumentar las velocidades de operación.
Se trata de un tramo de carretera federal de 110 kilómetros que el gobierno federal concesionará para rehabilitar y dar mantenimiento durante 10 años, según información de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT).
De acuerdo con el portal Proyectos México, de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, esta obra estaba prevista para ser licitada en este año, y actualmente se encuentra en etapa de estudios.
Entre los beneficios que la obra promete está incrementar la capacidad de la vía, mejorar la seguridad vial y reducir los costos de operación vehicular de los usuarios.
Proyectos de la IP reactivarán la economía
De acuerdo con el documento que será presentado este martes en Palacio Nacional, para el inicio de las obras de este proyecto carretero sólo hace falta que la Secretaría de Comunicaciones presente la solicitud de registro en Cartera, así como concluir el proceso de liberación de derecho de vía de tres kilómetros.
Como lo informó El Sol de México, desde finales de octubre miembros del Gabinete federal y representantes empresariales mantienen reuniones periódicas para definir una batería de 116 proyectos de infraestructura que se desarrollarán a lo largo de 2020, con una inversión aproximada de 70 mil millones de dólares.
El presidente Andrés Manuel López Obrador analiza los 61 proyectos de infraestructura que la iniciativa privada propone para reactivar la economía.
El paquete incluye obras de remodelación y modernización de aeropuertos, puertos, refinerías y trenes, además de la construcción de centrales eléctricas y hospitales. Se calcula una inversión de 254 mil 989 millones de pesos, según el texto del Acuerdo Nacional de Inversión en Infraestructura con el Sector Privado que los empresarios presentaron hace unos días al mandatario.
El plan considera tres etapas. En la primera son 15 las obras que ejecutará el sector privado en los próximos dos meses, con recursos propios por 158 mil 573 millones de pesos, pero deberá alinearse con los planes y proyectos del gobierno.