En su análisis de coyuntura, respecto a los datos económicos de noviembre, el Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) advierte que a pesar de la fragilidad económica con la que asume el nuevo gobierno su mandato, le externa su confianza y apoyo para un buen arranque de gobierno por el bien del país.
De acuerdo con el Indicador IMEF del Entorno Empresarial Mexicano (IIEEM), cada inicio de sexenio se caracteriza por su lentitud en ejercer el gasto público y hacen que el PIB no crezca de manera vigorosa durante su primer año de gobierno.
Los miembros de este organismo señalan que en particular se comentó que la nueva administración sufrirá esta consecuencia quizá de manera más intensa a la luz de la adecuación de la estructura del sector público que ha adoptado y al recorte de salarios de la capa superior de la burocracia, lo que implicará un rezago para atraer funcionarios experimentados y capaces.
Este análisis de coyuntura expone que en cuanto a la evolución y perspectivas de la economía del país se destaca que la inversión, de acuerdo con los últimos datos disponibles, mostró una contracción y se observó la misma tendencia negativa en sus componentes de la construcción y en maquinaria y equipo, nacional e importada. Por su parte, el consumo moderó su expansión de acuerdo con las cifras de la ANTAD a octubre.
Señala que los datos preliminares de noviembre muestran que el “Buen Fin” tuvo un buen desempeño sobre las ventas de las tiendas de autoservicio y departamentales.
Indica que para el Comité del Indicador IMEF, lo que ha dominado el centro de la discusión económica durante las últimas semanas han sido las acciones que el gobierno entrante estuvo tomando.
Agregó que prácticamente todas estas acciones o declaraciones propiciaron una volatilidad en los mercados cambiario y bursátil. “Los eventos que propiciaron esta inestabilidad se asociaron con la cancelación del aeropuerto, así como las declaraciones sobre algunas
intenciones de políticas adversas para el sector energético y, un amago, por parte de Morena de cancelar algunas comisiones bancarias, entre otras.
Ante tales eventos, señala que los miembros del Comité del Indicador externaron su preocupación, señalando que aún antes de entrar en funciones, el gobierno electo haya propiciado estos acontecimientos volátiles en los mercados financieros nacionales.
Buena parte de la discusión se centró en lo que habría que esperar del próximo Presupuesto Federal, que será sometido al Congreso el 15 de diciembre. Se hizo hincapié en que los compromisos financieros asociados a la cancelación del NAIM son cercanos a 200 mil millones de pesos para 2019, y que el presupuesto deberá acomodar tal choque.
Sin embargo, el grupo mostró confianza en que se respetará la promesa de campaña de generar un superávit primario del PIB y de no contratar deuda adicional.