La inseguridad es una problemática que a diario enfrentan muchos países en todo el mundo y México no es una excepción a la regla. El sentimiento de inseguridad se ha convertido en norma no sólo en América Latina, sino también en varios países desarrollados, señala el doctor en Ciencias Sociales de Universidad de Guadalajara y el Centro de Investigación y Estudios en Antropología Social, Carlos Barba Solano.
De acuerdo con un reciente informe del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) 68% de la población mexicana afirmó vivir en una ciudad insegura, mientras que tan sólo 31.7% determinó lo contrario. Son muchas las razones que se adjudican a este sentimiento de inseguridad, entre las que se destacan haber presenciado conductas delictivas y antisociales. El mismo estudio señala que el miedo ante el delito provoca importantes modificaciones en la rutina de los mexicanos, quienes dejaron de portar joyas, dinero o tarjetas de créditos.
También se comprobó que esta realidad tiene una incidencia en lo que la población piensa acerca del desempeño policiaco: 66.7% planteó que su accionar era poco efectivo o incluso nada efectivo, frente a 32.8% que confía en el desempeño de dicha entidad. Un alto porcentaje de los encuestados manifestó que en los últimos meses ha escuchado o presenciado situaciones como consumo de alcohol en las calles, robos y vandalismo. Razón por la cual 36.8% considera que en un futuro la situación permanecerá sin cambio algunos, 24% que esta realidad empeorará, mientras que 18.8% cree que se presentarán mejorías.
La sociedad siempre ha estado marcada por una serie de temores como la pobreza o sufrir una enfermedad, pero en la actualidad se han sumado otros miedos como ser víctima de la violencia o la delincuencia. Por esto muchos autores señalan que desde los años 70 vivimos en una sociedad del riesgo, situación que antes no ocurría porque predominaba la idea de que el futuro sería siempre mejor. En muchos países de América Latina también se experimenta la inseguridad como un problema en el cual los ciudadanos se sienten amenazados por una serie de temores, especialmente ante la crisis de la seguridad pública.
1.- La encuesta revela que 47% de los mexicanos se trasladaría a otra ciudad si tuviera la oportunidad.
2.- Pero 4 de 10 son optimistas y tienen esperanzas de que esta problemática comience a revertirse en el corto plazo.