El tren interurbano de pasajeros México-Toluca, iniciado por el gobierno anterior, es ejemplo de corrupción y mala planificación en las inversiones públicas, y para terminarlo su costo se elevará a 89 mil millones de pesos, más del doble de lo previsto, señaló el secretario de Hacienda, Carlos Urzúa Macías.
Al participar en una mesa de discusión en Washington D.C., en el marco de las Reuniones de Primavera del Banco Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), el encargado de las finanzas públicas de México destacó la importancia que tiene la inversión para el crecimiento económico.
Sin embargo, dijo, una de las razones por las que en parte, México ha tenido bajas tasas de crecimiento en la última década, se debe a que las inversiones públicas han sido muy bajas comparadas con instancias internacionales, pero las privadas “sí han sido muy buenas”.
En la mesa de discusión “Lograr que el crecimiento beneficie a los pobres”, realizada en la sede del Banco Mundial en Washington, apuntó que la inversión pública en México representa 2.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), un bajo nivel que tiene que mejorarse, al igual que la calidad de las inversiones.
Sostuvo que el efecto multiplicador de las inversiones en México es mucho más bajo que en la mayoría de los países de América Latina porque hay corrupción, hay mala planificación y muchos otros elementos.
Ejemplo de ello, argumentó el titular de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), es que durante el gobierno cuyo periodo concluyó el año pasado inició la construcción de un tren de pasajeros que conectará al estado de México con la Ciudad de México.
Este tren interurbano de pasajeros inicialmente iba a costar 29 mil millones de pesos, “pero gastaron el doble de esta suma, casi 60 mil millones de pesos y ni siquiera se ha concluido”.
“Calculamos que necesitaremos otros 29 mil millones de pesos para terminar con un sistema ferroviario como el que se había previsto y además estaba mal proyectado, porque no pasa por el aeropuerto de Toluca, la capital del estado de México, o sea que necesitamos más inversión para conectar a Toluca con el resto del estado”.
Como en otros países, continuó, la corrupción es un problema en México y es uno de los factores más importantes del bajo crecimiento del país, pero el nuevo gobierno federal está tratando de combatir este flagelo de manera muy decidida.
Por eso está centralizando la mayoría de los procesos de adquisiciones y contrataciones en la Secretaría de Hacienda para tratar a retirar a muchas personas de estas acciones, refirió Urzúa Macías.
Comentó que el crecimiento económico se está desacelerando en todo el mundo y en ese entorno es difícil combatir la pobreza, pero el nuevo gobierno está tratando de hacerlo, pero no hay que olvidar que “México es tres países a la vez en un solo territorio”.
En el norte del país, apuntó, los estados son más modernos y tienen buen crecimiento; en el sur por el contrario están muy retrasados, con tasas de crecimiento muy bajas, y en la parte centro hay un rápido crecimiento.
El secretario de Hacienda añadió que en los últimos 15 años los estados del sur acumularon un crecimiento de 23 por ciento, en el norte de duplicó a 46 por ciento y en el centro se triplicó a 69 por ciento.
En la mesa de discusión participaron también la economista en jefe del Grupo del Banco Mundial, Pinelopi Goldberg; el director ejecutivo y vicepresidente de Morgan Stanley, Domenico Siniscalco, y la profesora del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), Esther Duflo.