La nueva temporada de Almacenados comenzó este fin de semana en el Teatro de las Artes con la ausencia de Héctor Bonilla, quien regresaría al montaje después de tres años junto a su hijo Sergio.
El actor no pudo estar presente ya que durante los ensayos un día antes sufrió un ligero accidente que resintió una lesión de la pierna izquierda que tuvo durante un rodaje. Sin embargo, la función se llevó a cabo con Fernando Bonilla –director del montaje– en su lugar.
“Tomamos la decisión de que lo más conveniente para su salud es que no continuara con la temporada hasta que los médicos nos dijeran que estaba seguro”, comentó Sergio Bonilla al inicio de la función.
“Pensamos que es lo que él hubiera hecho en esta situación. Hay que sacar el barco adelante”.
Para la caracterización del señor Lino, Fernando Bonilla usó parte del vestuario que su padre llevó "en un monólogo que hizo durante 40 años, Sobre el mal que hace el tabaco”, agregó Sergio. “Así que esta puesta llena de significados”.
La función de Almacenados comenzó en punto de las 20:00 horas. Con una escenografía compuesta únicamente de un escritorio, un locker de dos pisos, una mesa con un checador y al otro extremo una Virgen adornada con luces y música navideña.
Esta historia sigue a Lino (Fernando), un hombre de estricto orden que después de 29 años realizando la misma rutina diaria como vigilante de un almacén será jubilado contra su voluntad. Ahí conoce a Min (Sergio), el joven que lo sustituirá y a quien debe capacitar para sus actividades en cinco días.
Las reglas establecidas y la rutina diaria cambian cuando Min comienza a cuestionar todas las acciones de Lino. La relación entre ambos, que en inicio es complicada, termina convirtiéndose en una complicidad donde ambos aprenden sobre el significado de la vida y el cumplimiento de deberes.
La camadería entre ambos personajes se nutre mucho de la relación de hermanos de Sergio y Fernando Bonilla. El primero aporta a Nin un perfil juvenil y rebelde, mientras que en el papel de Lino, la caracterización y la brillante interpretación de un hombre adulto con pasos lentos y dudoso de la capacidad del nuevo, ofrecen una comedia excepcional.
La obra, escrita por David Desola, permanecerá en la cartelera del Teatro de las Artes de viernes a domingo hasta el 14 de noviembre.