La llamada nueva normalidad modificó la forma de hacer televisión. Antes de llegar al estudio 3 de Tv Azteca Ajusco, desde donde se transmite el programa Todos quieren fama, un nuevo formato de concurso de canto que conducen Roger González y Valeria Cuevas, se pasaron varios retenes para cumplir con el estricto control sanitario.
El ir y venir de gente en los pasillos, los sets atiborrados de personas, el contacto directo y el bullicio generalizado que se vivía a diario fueron sustituidos por tapetes sanitizantes, uso obligatorio de cubrebocas, marcas para que las personas mantengan la sana distancia, gel antibacterial y cámaras infrarrojas para tomar la temperatura como medidas básicas generales de cuidado.
En el caso de este reality show que produce Ángel Aponte el equipo de trabajo se redujo a sólo un 30 por ciento, el programa sólo se hace con 33 personas.
Roger González atestiguó toda la evolución. “A mí me tocó ese cambio en Venga la alegría, con esta nueva normalidad si se sentía como vacío, como bodega. Conforme pasaron las semanas, me fui acostumbrando, ya me siento más cómodo, yo creo que ahora si regresara mucha gente de producción, me sentiría abrumado, creo que está el personal necesario, me siento más en confianza con grupos reducidos”.
Todos quieren fama es un programa que se transmite en vivo, además de los conductores, están los observadores, un grupo de personas con experiencia en el medio del entretenimiento que apoyan a los concursantes. También hay público en vivo, en cantidad muy reducida, colocados en lugares estratégicos para mantener la sana distancia y usando cubrebocas permanecen durante todo el programa para alentar a los contendientes. Se suma una banda en vivo fija y por supuesto los participantes, a quienes se les convoca a audiciones virtuales.
El productor Ángel Aponte, quien antes ha realizado programas como La academia, dijo que se han tenido que adaptar en los procesos para conservar un programa de calidad, pero a la vez evitar contagios por Covid-19.
“Te reinventas, ahora sólo tenemos seis cámaras porque necesitamos menos camarógrafos dentro del estudio, y así también se disminuye el número de asistentes de cámaras. Yo tenía antes a un coordinador que en los cortes a comerciales se acercaba a los conductores para llevarles el contenido, ahora esas indicaciones las comunicamos por el apuntador desde cabina”.
Aunado a eso, el programa entró en un nuevo diseño de producción que permitiera tener un plan de emergencia en caso de que alguna de sus piezas fundamentales enfermara de coronavirus.
“Tienes que planear como reemplazar a alguien que se enferme, incluyéndote a ti mismo. Yo ya sé quién me reemplazaría a mí, a los conductores, al equipo de contenido, tenemos que planear y pensar qué hacer si alguno sale afectado”, señaló el productor
Seguir todas las nuevas reglas no ha mermado el ánimo de Roger González. “Después de que a toda la humanidad nos tocó la pandemia, que hemos cambiado nuestras rutinas y nuestra forma de vida, cualquier cambio ya es menor, creo que es un aprendizaje para todos nosotros como seres humanos, no hay que estar encasillados en nuestra zona de confort. Esta es la nueva normalidad que estamos viviendo, no solamente en televisión sino en el mundo”.
Todos a cantar
Todos quieren fama es un reality show musical en el que un grupo de personas apasionadas del canto, que no se dedican al mismo de manera profesional, se someten a una competencia televisada para darse a conocer en la pantalla chica y además ganar un premio económico.
“Son gente común, en este estreno tenemos a una señora que trabaja en un tianguis, a un intendente, a un estudiante. No estamos calificando la voz, sino el carisma y ese encanto que haga que el público vote por ellos y continúen en la competencia”, explicó Roger González.
Las eliminatorias son en una semana, bajo un formato nunca antes visto en la televisión nacional. “Presentamos todos los lunes seis participantes nuevos, de martes a jueves eliminamos uno cada día para que queden tres finalistas que tienen 24 horas para hacer un show con producción, maquillaje, vestuario, escenografía, y de ahí sale el gran finalista que se va a llevar 50 mil pesos cada semana”, confirmó Roger González.
Anette Michelle, Alex Sirvent y Samo fueron los observadores en la semana de estreno de Todos quieren fama. “Ellos apoyan a los participantes con sus comentarios, pero quien decide al ganador es la gente a través de la aplicación de TV Azteca Conecta”, explica Roger.
Todos quieren fama se transmite de lunes a viernes a 16:30 PM por Azteca Uno.
Datos que pueden ayudar para hacer una fotogalería:
- Los concursantes son sometidos a pruebas de Covid-19 antes de entrar a la dinámica del programa.
- Todo el personal del staf, sin excepción, debe utilizar cubre bocas en todo momento.
- Este formato entró a sustituir a Enamorándonos, que tuvo que salir del aire debido al contacto físico que debía existir entre los concursantes para llevar a cabo sus dinámicas
- Valeria Cuevas debuta en la televisión mexicana con Todos quieren fama.
- Hay público en vivo durante el programa, la regla es usar cubrebocas y mantener su ubicación en la señalización puesta en el piso, para mantener la sana distancia.