Con la llegada de Bandersnatch, la película de Black Mirror que estrenó Netflix el 28 de diciembre, se ha desatado la euforia por esta propuesta interactiva de ver el productos audiovisuales donde el usuario guía el destino de los protagonistas de la historia.
En esta cinta, la historia toma distintas rutas según las decisiones que se tomen para desenlazar en uno de los cinco finales diferentes que existen. Según las opciones elegidas, el filme puede durar entre 45 minutos y dos horas.
Arturo Aguilar, crítico y especialista en cine, destaca que “Bandersnatch quedará como referente de una primera presentación pública masiva de una narrativa que apuesta por integrar elementos de los videojuegos con una historia que se va desarrollando”. Y destacó que parte de la intención de crear esto es unir dos industrias de gran lucro como la del cine y los videojuegos.
Este no es el primer proyecto de este tipo que la plataforma estrena. En junio de 2017, Netflix lanzó El Gato con botas: Atrapado en un cuento épico y Buddy Thunderstruck: La lista de quizá, en este mismo formato, aunque enfocado al público infantil.
Aunque luzca novedoso, la idea no es nueva, en parte proviene de “esta tradición literaria de novelas de aventuras de los años ochenta, donde llegabas a cierta página y te decían ‘Si decides entrar a la cueva ve a la página 120. Si decides bajar al bosque ve a la página 180’”, comenta Aguilar. De hecho, Variety informó el viernes que la editorial Chooseco LLC demandó a la plataforma por infringir la marca de sus libros Elige tu propia aventura.
La idea de que el espectador interactúe con la historia no es nueva. En algunos DVD’s como el de Shrek 2 se incluía un material extra donde los personajes competían en un show tipo American Idol y donde el usuario elegía con su control quién ganaba.
En la televisión abierta o por cable ocurre desde hace años. La televisora colombiana Canal Caracol presentó en 2006 dos proyectos que resultaron una telenovela interactiva: Buscando el cielo, donde los protagonistas los elegía el público dentro del reality Buscando estrellas. Sin embargo el proyecto fracasó.
En México la telenovela Mentir para vivir desarrolló en 2013 una aplicación donde el público interactuaba con su elenco. En años anteriores también realizaban votaciones donde el público llamaba para votar el destino de sus protagonistas. Además de presentar finales alternativos que se veían en sus redes sociales o sitios web.
“Eran como las versiones beta de este tipo de interactividad. Lo intentaron con la tecnología que había en su momento. A finales de los años noventa, TV Azteca sacó un control remoto interactivo (Telegana) donde podías votar por sus concursantes. Eran los primeros intentos y desde entonces hemos visto muchos distintos”, destaca Aguilar.