A pesar de la lluvia, los problemas de sonido y la mala organización, Fey se presentó en el Zócalo Capitalino con un breve concierto que concluyó la celebración de la 40 Marcha del Orgullo Gay.
En punto de las 21:30 horas la cantante apareció en el escenario con un cuerpo de ocho bailarines que la acompañaron en La noche de mueve, con la que dio inicio a esta velada que duró escasos 40 minutos.
“Es un sueño tenerlos a todos aquí”, dijo la cantante en medio de Te pertenezco, que hizo preámbulo a Barco a Venus y un popurrí que incluyó Popocatépetl, Se lo que vendrá y Cielo liquido.
Tras agradecer a la comunidad LGBT su compañía por más de 23 años de carrera, Fey ofreció Comiéndome tus besos, que contrastó con los temas anteriores al presentar un sonido más urbano.
Con Azúcar amargo, Fey hizo que los miles de asistentes ondearan las banderas arcoíris que llevaban consigo y provocó un salto unánime de las parejas, familia y grupos de amigos presentes.
Al ser la embajadora de esta celebración, el Comité Incluyente le entregó un reconocimiento en forma de colibrí, signo de la libertad que representa la Marcha del Orgullo desde hace 40 años.
Fey terminó la noche con Muévelo y dejó ansioso al público que esperaba escuchar otras canciones como Media Naranja o No tú no nadie, y que no sonaron por el poco tiempo que tuvo en el escenario.
Antes de Fey, artistas como Los Güapayasos, La Sonora Dinamita y más también fueron parte de la celebración pero solo interpretaron una o dos canciones por la mala programación de tiempos entre cada presentación , ya que eran cortados abruptamente sin tener la oportunidad siquiera de agradecer su presencia, lo que provocó molestia y rechiflas por parte de los asistentes.