Cuarenta años después, regresa Vaselina (Grease) a las salas de cine, sin duda un clásico musical del género juvenil que sacudió a los chavos a ritmo de rock and roll y marcó una época. Se trata de uno de los musicales más exitosos en la historia de la cinematografía mundial, cuyo estreno tuvo lugar el 16 de junio de 1978, protagonizado por John Travolta y Olivia Newton-John.
En realidad, es la versión fílmica del musical de 1972 original de Jim Jacobs y Warren Casey que, por su éxito en el teatro, fue llevado a la pantalla grande.
En algunos países latinoamericanos el título lo cambiaron por Brillantina, mientras en otros, como España, se mantuvo el original en inglés: Grease.
En México, la cinta producida por Allan Karr y Robert Stigwood, quien trabajó muy de cerca con Los Beatles, se estrenó el 2 de noviembre de ese mismo año, aunque cinco años antes Julissa y Benny Ibarra, entonces marido y mujer, presentaron el musical en el teatro Manolo Fábregas de la capital mexicana. Más tarde la misma obra inspiraría a Julissa y a su hermano Luis de Llano Macedo a crear el grupo infantil La Onda Vaselina, del cual se desprendió el grupo actual OV7, con algunos de sus integrantes ya creciditos y aún en activo.
Precisamente, con motivo del 40 aniversario de la cinta, el productor Morris Gilbert presenta una edición 2018 en el teatro San Rafael de la colonia del mismo nombre, aquí en la capital de nuestro país.
DEL TEATRO A LA PANTALLA
Con una inversión de 6 millones de dólares, la película original se convirtió en uno de los grandes éxitos taquilleros de 1978, recaudando cerca de 400 millones de dólares apenas detrás de Tiburón (Jaws, mandíbulas) el éxito indiscutible del año.
La trama gira en torno a la dulce y tierna historia de amor de un par de adolescentes en la etapa de la punzada: Danny Zuco y Sandy Olsson (Travolta y Newton-John). Ambos sostienen apasionado romance durante las vacaciones de verano temiendo que no volverán a verse, sin embargo, ¡oh, sorpresa!, el destino hace que vuelvan a encontrarse al comenzar el nuevo ciclo escolar y todo es miel y baile y canciones con música de rock and roll.
Integrante de los fantásticos Bee Gees, Barry Gibb participó en la composición de la música, logrando una atmósfera musical propia de los años 50, cuando el rock and roll se encontraba en ciernes y hacía estremecer al mundo entero.
Entonces las chicas de crinolina y tobilleras blancas paseaban con los chicos de pantalones entallados y copetes envaselinados (de ahí el título de esta historia) en lujosos automóviles de moda, haciendo de su vida un inocente “reventón” que empezaba a preocupar a sus mayores. Socialmente significó el inicio del desprendimiento juvenil de una paternidad férrea y absorbente.
Tiempo más tarde tratando de repetir el éxito se realizó una continuación, Grease 2, dirigida por Patricia Birch, coreógrafa de la primera parte, pero ya no fue lo mismo. John Travolta se encargó de la dirección artística, llevando en los roles principales a Maxwell Caulfield y Michelle Pfeiffer.