El perrito Messi, de la cinta Anatomía de una caída, se robó las miradas en la ceremonia de los Oscar, luego de la polémica que se desató porque en un principio quedaría fuera.
El lomito que ha llamado la atención desde su paso por el Festival de Cannes –donde incluso recibió un galardón alternativo– participa en la cinta dirigida por Justine Triet como el perro guía de un niño con debilidad visual.
Messi es un border collie e interpreta al perrito Snoop en la cinta, donde la protagonista, Sandra Hüller, da vida a una mujer que es llevada a juicio tras la muerte de su esposo.
Sin embargo, pese a que el papel de Messi fue reconocido en un festival de la talla de Cannes, su participación en la ceremonia de los Oscar se tambaleó, pero la presión en redes sociales finalmente hizo que los organizadores cedieran.
Messi apareció en un par de segmentos durante la gala de los Oscar, pero para evitar que sufriera estrés durante la ceremonia, sus participaciones fueron grabadas antes del evento.
El perrito, que ya ha pasado por varias grabaciones de cine, también estuvo presente en el almuerzo previo a la premiación, donde sorprendió con sus dotes actorales al elenco de las cintas nominadas.
En una entrevista con Variety, Emma Stone declaró que en un momento los actores presentes se preocuparon por la salud del perrito, ya que durante el almuerzo dio muestra de sus capacidades y fingió estar muerto.