Dos de los grandes expositores famosos de la cultura artística alguna vez se conocieron.
Durante una reunión en Hollywood en 1945, cortesía de Jack Warner de Warner Bros., Walt Disney y Eugenio Salvador Dalí congeniaron de manera grata y acordaron unir sus talentos para elaborar una obra animada única e impactante.
Fue así que en 1946 ambos comenzaron a trabajar en una historia que jamás finalizaron.
Según registros del Bank of America, Disney desembolsó una fuerte cantidad monetaria para el pago de los servicios de Dalí, sin embargo, después de varios meses de trabajo frustrado, Disney decidió finalizar la colaboración que no puedo completarse.
"Destino", la obra proyectada 58 años después
Walt Roy E. Disney sobrino de Walt Disney, encontró los sketchs y el material producido por el artista español.
Encantado con la idea, decidió concluir el proyecto, destinó los fondos necesarios para crear la animación y la producción. El resultado, un cortometraje de 6 minutos que expone el romance de una chica con el dios griego del tiempo (Cronos).
Este trabajo fue nominado por los premios Oscar a la categoría de "Mejor cortometraje animado" en 2003.
Aunque no fue premiada, la animación sublime retrata la obra surrealista (expresión de los sentimientos con las figuras) de uno de los más grandes exponentes del vanguardismo en el mundo.