El autoempleo requiere mucha disciplina. Pero resulta que enocasiones las necesidades económicas de una madre de familiadedicada a las ventas de joyería son apremiantes y no facilitanque se puede reinvertir las ganancias, explica la empresaria Maríade Jesús Ortega, propietaria de D’Kermely joyería de plata.
Llegar a ser una empresaria exitosa, expresó, en su casoempezó como parte de una historia familiar y personal. Su negocioinició cuando era una mujer profesionista que tuvo que buscarautoemplearse tras dejar un empleo estable por una tragediafamiliar.
Así inició un negocio, ubicado en Coatepec, en Jiménez delCampillo, que ahora busca apoyar y dar una fuente de ingresos amujeres, principalmente a madres de familia, que no pueden accedera una fuente laboral convencional.
La vida de esta mujer, ahora una empresaria realizada, cambióradicalmente tras un accidente. Pero ella admite que todo el dolorde madre se canalizó en crear la empresa que no sólo le dio uningreso económico a su familia, sino que logró ser un apoyo paraotras personas que como ella no podrían acudir a una oficinaconvencional porque tienen la necesidad de atender su hogar.
Su negocio, explica, es vender joyas de plata al mayoreo. A lasvendedoras se le da un precio especial. Su ganancia es al 100%.Para que sea atractiva. La venden entre sus conocidos a un precioespecial de mayoreo.
María de Jesús Ortega recuerda que su meta era realizarse comoprofesionista, pues estudió la carrera de Ingeniería Industrial ydesempeñarla y durante un tiempo lo hizo, pero por circunstanciasfamiliares tuvo que dedicarse al cuidado permanente de un pequeñahija.
Se dio cuenta que una problemática similar la tienen muchasmujeres y entonces había que pensar en trabajar y darle unaoportunidad a otras madres que requieren de tener un ingresoeconómico para sostener o ayudar en sus hogares.
Se inició en las ventas, sin saber mucho sobre el tema, pero sepuso a estudiar mercadotecnia y algunos otros diplomados y entoncesse da cuenta de que puede salir adelante y ayudar a otros.
Es por eso que inició hace 19 años el negocio de mayoreo yrecuerda con orgullo que fue una de las pioneras en la venta deplata al mayoreo en Xalapa.
Costó mucho esfuerzo y trabajo levantar su empresa de joyería,pero ahora que se ha cristalizado el proyecto, siente que debeaportar más y crecer, porque eso le permitirá apoyar a esasmujeres que tienen hijos enfermos y que no podrían tener un empleoformal, con un horario establecido, “sino que requieren una formacomo la que ella ofrece de hacerlo en los tiempos en que ellaspueden, sin presiones”.
Como parte del éxito que tiene su empresa, explica que buscamotivar a sus vendedoras a trabajar lo necesario para lograr susmetas.
Las ventas de joyería han disminuido como ocurre en todos losnegocios en la ciudad, porque se vive una crisis financiera que haimpactado a todos los sectores, “pero yo motivo a mis vendedorasa que salgan y busquen otros clientes, porque no podemos quedarnoscruzadas de brazos diciendo que la economía está mal, sino quehay que ver cómo generar medios para estar mejor, entonces, hayque crear una oportunidad para trabajar más a pesar de laproblemática.
Aunque hay una crisis, explicó, los negocios tienen que seguirfuncionando porque “las crisis son una oportunidad deautoemplearse y generar fuentes de empleo para otros”.
Como se trata de joyería, dijo que a la mayoría de las mujeresles gusta y es un producto que se puede ofrecer con gusto.
En cuanto a las mujeres que trabajan en su empresa, comentó quecomo en todas hay algunas que están casi desde que inició hace 19años, pero también hay las que van y vienen porque por cuestionespersonales no pueden permanecer siempre en el negocio, pero siempreregresan porque saben que sus ingresos son importantes si le echanganas.
Hay muchas mujeres que trabajan en las ventas de joyeríamientras no tienen empleo, cuando encuentran lo dejan un poco o hayquienes no lo dejan nunca porque les gusta el comercio de lajoyería. “Una gran parte combinan las ventas con un empleo deoficina porque así se ganan un extra que a nadie le caemal”.
Obviamente, señala que a cualquier mujer un empleo fijo le daestabilidad, pero muchas tienen que combinar su rol de madres yesposas con una actividad laboral y eso es lo que hace que lasventas se acomoden a los tiempos que tienen libres durante eldía.
Expone que hay muchas mujeres que tienen facilidad para lasventas, pero el problema es que sus necesidades económicas sonapremiantes y se gastan las ganancias rápidamente, pero no lesqueda para reinvertir y eso es un verdadero problema.
“Ya cobraron y tuvieron que comérselo y eso no es bueno, perosiempre hay forma de buscar apoyarlas, porque obviamente se gastanel dinero en cuestiones de familia, no porque no intenten seguir enel negocio de la joyería. El negocio si es bueno porque sonexcelentes vendedoras, pero sus problemas económicos no lespermiten reinvertir”.
Tras 19 años de experiencia en las ventas de joyería, señalóque hay que tener una habilidad especial para ser exitoso en lasventas, “no cualquiera puede. Pero la verdad es que este negociose trata de un autoempleo que requiere de metas financieras departe de quien lo quiere emprender”.
La empresaria María de Jesús Ortega recomienda que quienquiere ser vendedor debe tomarlo como un empleo, que se fijen horasy metas económicas. Es decir, si no se puede trabajar las ochohoras, debe fijarse al menos una cifra de ventas, sin importar eltiempo que le lleve, eso es vital para las que quieren lograr algoen el aspecto económico, más ahora que la entidad.
