La crisis económica y el desempleo ha provocado que lapoblación participe cada vez menos en la colecta anual deCáritas. La voluntaria Karina Morales Campos explicó que ese esel único día en que Cáritas Xalapa sale a la calle a pedir apoyoeconómico, que es acompañado de un festival artístico y unakermés para darle mayor realce al Día de la Caridad.

Detalló que las tres líneas de acción son la asistencia,promoción  y conciencia social, por lo que se apoya con despensabásica, becas escolares, medicamentos, albergue temporal paragente que llega de fuera, así como con consultas médicas,sicológicas y asesoría jurídica a las personas de escasosrecursos.

“Tenemos un asilo para ancianos y personas que no están tangrandes pero están en fase terminal que no tienen familia que lescuide, les acompañe o que si la tienen no los cuidan; el mismoestá en la colonia El Sumidero, donde hay alrededor de 35personas”, abundó.

Explicó que el dinero que se recauda es para esos servicios,pero dada la crisis apenas les alcanza para cubrir los gastos de untrimestre. “Por eso invitamos a la ciudadanía para que se sumecon lo que sea su posibilidad apoyar para Cáritas”,señaló.

Recordó que el año pasado lograron reunir un millón 200 milpesos y aunque cada año esa cifra disminuye, se espera que no seade manera significativa.

“Nosotros decimos que Cáritas es una obra de Dios y Dios lalleva porque la falta de empleo y muchas cosas han llevado a que lagente ya no aporte como antes, pero la aportación está y la genteconfía en que se hace llevar lo que da para quien lo necesita”,remarcó.

Hasta 100 solicitudes atienden al día en el área defarmacia

Comedor recibe a 50 personas en un solo horario, diceadministradora

Muchas son las necesidades de las personas que acuden a Cáritasen esta ciudad de forma diaria, tanto de Xalapa como de otraspartes procedentes del estado, de acuerdo con testimoniosrecogidos.

Sarahí Oliva Martínez, que vive en la congregación Chiltoyac,acude a Cáritas a solicitar medicamento para su esposo, quientiene una hernia en la columna desde hace siete años.

“Yo siempre vengo aquí y cuando hay medicamento me lo dan,necesitamos pregabalina porque la toma cada ocho horas, la cajadura hasta 15 días y cuesta como 400 pesos, lo que no podemospagar”, dice.

Recuerda que desde 2010 Cáritas es el único lugar donde puederecibir ayuda, pues no cuenta con el recurso para adquirir elmedicamento que requiere y su esposo, quien se dedica al campo,necesita de él.

La señora Reina Ríos Galván lleva ocho días en el alberguede Cáritas junto con su esposo Agustín López. Son originarios deChintipan del municipio de Tlachichilco, pero se vieron obligados aviajar a la ciudad porque sus dos hijos tienen padecimientosmentales, por lo que están internados en el Instituto Veracruzanode la Salud Mental (ISM) “Doctor Rafael VelascoFernández”.

“Se pierden, pierden la conciencia, la memoria y no nosconocen cuando les pega la enfermedad. Yo necesito el apoyo porqueesta semana les tienen que hacer 10 estudios por los dos, somos debajos recursos y no tenemos nada”, dijo.

Recordó que la única persona que les apoyaba es el hijo queahora está enfermo y por quien tiene que ver la manera de saliradelante.

“Yo me dedico al trabajo doméstico y mi esposo se dedica alcampo. Es muy difícil para nosotros, no tenemos recursos, somosindígenas y no tenemos de dónde agarrar dinero, en mi rancho nohay quien me apoye porque todos vivimos en plena pobreza”,dijo.

Quienes laboran en Cáritas estiman que en un día llegan abrindar algún tipo de apoyo hasta a 700 personas en las oficinascentrales y en las 52 parroquiales.

La administradora de Cáritas Xalapa, Margarita MendozaHernández, dijo que tan sólo en farmacia llegan a atender a hasta100 solicitudes  al día, pues es el servicio más demandado.

Al comedor diariamente llegan alrededor de 50 personas, sólo ala hora de comida, aunque a las personas que están albergadas seles ofrece desayuno, comida y cena.

“Son personas de escasos recursos que vienen a consulta;últimamente hemos tenido a muchas personas que vienen a loshospitales, ahorita tenemos a una señora que tiene a su bebéinternado en el hospital civil y a una pareja con sus dos hijos enSalud Mental”, detalló.

Pero además últimamente por las situaciones en otros paíseshan dado refugio a migrantes, mientras resuelven su situación quellevan más de un mes en Cáritas.

Explicó que en el caso de la farmacia se sostiene pordonaciones que dan las personas, además de que se surte cada tresmeses por los antibióticos que no son regalados por lasrestricciones que existen. “Y hay gente a la que se apoya conpago de hemodiálisis, radioterapias, quimioterapias y otros”,dijo.

Mendoza Hernández refirió que el recurso con el que cuentannunca será suficiente, pues la población en pobreza llega a pedirtodo tipo de apoyo, en algunas ocasiones para sacar a susfamiliares de los hospitales que resultan ser muy caras.

“A veces son personas que necesitan clavos o fierros, porquese fracturaron, eso también es muy caro, a veces son 40 mil pesos,27 mil pesos y pues uno les puede dar un poquito, pero nunca essuficiente. De aquí se sostiene a todas las personas que vienen asolicitar apoyo, pero también el albergue definitivo que está enVenus 8, en el barrio del Sumidero”, detalló.

En este último hay 38 abuelitos a quienes se les atiende conalimentación, pañales, medicamentos y cuidado todo el tiempo,desde que se les recibe hasta que fallecen, pues no cuentan conningún familiar que vea por ellos.

Además de ello, cuentan con un laboratorio de análisisclínicos en donde sí se pide una cooperación, dado que losreactivos son caros y sólo de esa manera podrá seguirfuncionando.

“Aquí vienen de Coatzacoalcos, Minatitlán, Cosamaloapan,viene mucha gente de Puebla, de Poza Rica y de todo ese rumbo.Vienen de todo el estado y de muchos otros también”, abundó.Otros servicios que brindan son consultas médicas, asesoríajurídica, apoyo sicológico con el apoyo de médicos, abogados ysicólogos voluntarios.

Por ello insistió en que lo que lograron recaudar ayer lesayudará para solventar los gastos de tres o cuatro meses, por loque es importante que la población siga siendo solidaria y pienseen quienes más lo necesitan.