Minutos antes de las 7 de la mañana don José llegó a la escuela Sara Felicidad Tapia Peredo para cumplir con el encargo de abrirle las puertas a los funcionarios de la casilla electoral de la sección 1862, en la ciudad de Xalapa, uno de los 212 municipios veracruzanos donde este 6 de junio se elije al próximo alcalde, así como a diputados local y federal.
En el Campo de Tiro, una de las colonias de la periferia de la ciudad, es posible escuchar el canto de los gallos, pero quienes no lo oyeron ni en el celular ni en el reloj despertador son algunos de los funcionarios y representantes de partidos, quienes llegan tiempo después de la hora acordada.
A pesar del retraso, todo fluye con normalidad, lo que resulta atípico es que media hora antes de las 8:00 de la mañana, cuando oficialmente inicia la jornada, no hay votantes, cuando en elecciones pasadas, en mismo horario, las filas ya rebasaban las 50 personas, asegura uno de los vecinos, quien observa desde la ventana de la casa.
A cuatro cuadras del jardín de niños pasa algo similar. La escuela primaria Benito Juárez también cuenta con casilla electoral pero no hay votantes.
Don José comparte que sí es extraño, pero considera que poco a poco irán llegando los ciudadanos. Para él es importante sufragar y asumir la responsabilidad de contribuir a la democracia.
Esta misma idea tiene la primera persona que llega a votar, una joven reservada que no da su nombre, solo, entre risas nerviosas, dice que llega temprano porque tiene que trabajar.
Después arriba don Mayolo Tepatlán, de 69 años, quien expresa su esperanza en que en el transcurso del día haya más gente.
"Que vengan con su cubrebocas y ya con eso", dice quien vive en la colonia Portón Colorado, donde las calles no están pavimentadas y resultan de difícil acceso si por alguna emergencia se tiene que entrar o salir en auto.
Ese es uno de los motivos que lo lleva a las urnas, que esta vez sí haya un presidente y legisladores que vean y resuelvan las necesidades de los más desfavorecidos.
En recorrido por otras casillas ubicadas en los límites de Xalapa con Banderilla hay similitud. Quizá el viento frío le ha impedido a los ciudadanos dejar las camas temprano, pero el escenario matutino no es para ponerse pesimistas, manifiesta Fabiola, quien es funcionaria de casilla.
Ella cree que será un buen día y a las 18 horas se podrá decir con orgullo que ni la pandemia por Covid-19 ni los hechos de violencia de los últimos días menguaron los ánimos del pueblo mexicano en general, y veracruzano en particular, de formar parte de la histórica elección electoral de 2021.