En 2023, el estado de Veracruz registró un resurgimiento de agresiones contra defensores ambientales, después de un año sin reportes. El Centro de Derecho y Justicia Ambiental (CEMDA) documentó cuatro incidentes en los que miembros de la comunidad enfrentaron criminalización, detenciones arbitrarias, difamación, intimidación y violencia física.
Estos ataques ocurrieron en mayo, julio, octubre y diciembre, marcando un retorno de la violencia contra quienes defienden el medio ambiente en la entidad.
Entre los principales agresores identificados se encuentran el gobierno estatal, la Fiscalía, empresas privadas, policías y grupos no identificados.
Estas agresiones ocurrieron en el contexto de la defensa del medio ambiente, la tierra y el territorio, principalmente en relación con proyectos del sector forestal, urbano y de vías de comunicación.
Contexto y antecedentes
Los ataques no son un fenómeno nuevo en Veracruz. Entre 2019 y 2023, el estado ha registrado 11 eventos de agresión contra defensores ambientales, con la excepción de 2022, año en que no se reportaron incidentes.
En 2019, el asesinato de un defensor en Sayula de Alemán por oponerse a un proyecto del sector hidrocarburos fue un trágico punto de inicio para una serie de agresiones en los años siguientes.
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En 2020, se documentaron cuatro ataques en Actopan, Carrillo Puerto, Xalapa y Tlapacoyan, destacando el homicidio de Adán Vez Lira, un reconocido ambientalista y defensor de la biodiversidad en Actopan, asesinado por su oposición a proyectos mineros. En Tlapacoyan, se registró el secuestro de un defensor ambiental en relación con conflictos vinculados al sector energético.
El 2021 no fue menos violento. Se registraron dos eventos de agresión en Actopan y Tlapacoyan, uno de los cuales resultó en el hallazgo del cuerpo de Miguel Vázquez Martínez, defensor del agua, tras más de tres meses de su secuestro. La falta de respuesta efectiva por parte de la Fiscalía General del Estado de Veracruz (FGE) fue duramente criticada por familiares y organizaciones.
Miguel Vázquez Martínez fue fundador de la Alianza de Comunidades y Organizaciones en Defensa del Río Bobos-Nautla y Tecolutla, la cual defiende los cuerpos de agua en la región de Tlapacoyan, ante proyectos hidroeléctricos, de minería y fracking.
El panorama nacional
En 2023, el CEMDA documentó 123 eventos de agresión contra personas y comunidades defensoras de los derechos humanos ambientales en México, resultando en 282 actos de violencia, incluidos homicidios, agresiones físicas y sexuales, criminalización y desapariciones. Jalisco, Oaxaca y Ciudad de México encabezaron la lista de estados con más ataques, con Jalisco siendo el más peligroso para los defensores ambientales.
A nivel nacional, 20 defensores perdieron la vida en 2023, con la minería, las vías de comunicación y el sector forestal siendo los más peligrosos.
El informe del CEMDA destaca con preocupación el aumento de agresiones relacionadas con desapariciones durante el último año. En total, se documentaron 11 eventos de este tipo, afectando a 19 defensores, muchas de ellos de comunidades indígenas, quienes continúan siendo los más vulnerables en esta lucha.
Los exhortos a las autoridades
Ante este panorama, el CEMDA ha exhortado a los gobiernos a implementar políticas integrales que protejan a los defensores ambientales, especialmente aquellos de comunidades indígenas, mujeres y niños.
Además, se ha solicitado la suspensión de proyectos que pongan en riesgo la seguridad de estas personas, así como la vigilancia y sanción de aquellos que operan sin la debida autorización ambiental.
La labor de los defensores ambientales es crucial para la protección de los ecosistemas y la biodiversidad en México. Son ellos quienes denuncian la devastación ambiental, organizan a sus comunidades, resguardan su cultura y exigen justicia. Para el CEMDA, “estas personas son las grandes guardianas y guardianes de la Tierra”.
