Xalapa, Ver.- Poco a poco se van a ir perdiendo cuerpos de agua dulce, pues al tener menos presión los ríos por el agua que se ocupa para consumo humano o riego e incluso por la falta de lluvia, el agua salada del mar tiende a ingresar a esas cuencas e incluso cuando lo hace a cuerpos de agua dulce éstos se pueden perder de forma definitiva y las poblaciones tendrán que buscar agua potable cuenca arriba, expresó Saúl Miranda Alonso, coordinador del Centro de Estudios y Pronóstico Meteorológicos de la Secretaría de Protección Civil de Veracruz.
Indicó que en temporada de primavera se dan mareas vivas, que es cuando el Sol está más cerca de la Tierra. Explicó que la marea se produce por la fuerza de atracción de los cuerpos celestes, como la Luna y el Sol, por eso diariamente se tiene marea alta y marea baja dos veces al día, pero no hay nada de especial en que de pronto pareciera que el mar se retira y gana espacio de playa.
Resaltó que hay lugares donde se dice que el mar se ha retirado; sin embargo, destacó que esos lugares no se pueden ocupar, pues en pocos días el mar recupera nuevamente el terreno que a simple vista quedó descubierto, pues el agua se vuelve a recuperar mientras se dan los movimientos.
Esto de las mareas vivas se dan principalmente en el equinoccio de primavera y de otoño, cuando el Sol está más cerca de la Tierra, pero esto es especialmente fuerte cuando se alinean la Tierra, Luna y Sol
Acerca del ingreso del agua salada sobre los cauces de los ríos, como es el caso del Pánuco, indicó que al utilizar agua e irle quitando fuerza al río provoca que el mar empiece a ingresar y a causar problemas al contaminar fuentes de agua dulce, pero destacó que incluso en huracanes hay probabilidad de que el agua dulce vuelva a empujar al agua salada.
Explicó que cuando hay menos afluencia de agua dulce hacia el océano se empieza a meter el agua salada y entonces empieza a avanzar, y es lo que pasa en lugares no sólo del Pánuco, sino también en el río Bravo, donde se usa tanto el agua que el mar ya se metió varios kilómetros.
Dijo que cuando el agua salina invade los acuíferos de agua dulce es difícil recuperarlos y esto sí es grave, pues las poblaciones dependen de esta agua que se ha filtrado de forma natural y si el agua salina invade la calidad de esa agua, ya no es buena, lo cual ocurre en muchos lugares de las costas veracruzanas.
Indicó que afortunadamente hay mucha lluvia y esto genera que los ríos tengan la suficiente fuerza para evitar el ingreso del agua salada del mar, pero en la zona norte es donde se tienen problemas de sequía. Indicó que todos los ríos del norte podrían padecer esta situación de intromisión de agua salada.
