Alarmante: niños de 9 años consumen cristal en zona de Xalapa

Los daños a la salud son, entre otros, psicosis, alucinaciones, cambios en la estructura y función cerebral, déficit en el pensamiento y en las destrezas motrices, pérdida de memoria y comportamiento agresivo o violento

Karla Cancino | Miguel Salazar | Diario de Xalapa

  · lunes 30 de septiembre de 2019

El consumo de metanfetamina, droga conocida como “cristal” | Foto: Diario de Xalapa

El consumo de metanfetamina, droga conocida como “cristal”, se ha incrementado de manera alarmante entre la población joven e incluso infantil, aseguró Iván Esaú Muñoz Hernández, padrino del grupo “Jóvenes Guerreros del Amor”, que atiende a personas con adicciones.

Refirió que el fácil acceso y lo altamente adictiva ha colocado al “cristal” como la “droga de moda” entre la población de la región y apuntó que su consumo le da a los adictos un periodo máximo de vida de 5 años.

El cristal provoca muerte neuronal al grado de que llega a secar el cerebro de quienes la consumen, afecta los pulmones, enfisema pulmonar y además trae consigo problemas psiquiátricos graves e irreversiblesprecisó

Muñoz Hernández dio a conocer que al grupo “Jóvenes Guerreros del Amor” —ubicado en Xalapa— han llegado niños de hasta 9 años que ya tienen adicción a esta droga y están presentando los efectos de la misma.

Dice que aunque no se atiende a menores de edad, los casos que han llegado se han canalizado a las instituciones de salud y asistencia correspondientes con el fin de que reciban atención.


Felipe Miranda, psicopedagogo, manifestó que los efectos mentales que el cristal causa a quienes la consumen son “brutales”, ya que ocasiona un desdoblamiento de la personalidad y altos niveles de paranoia.

Por ello, dijo, los familiares de las personas adictas buscan de manera urgente atención para ellos. “Hay gente que piensa que los está buscando la policía, los extraterrestres, o el diablo (…) Genera una desconfiguración de la estructura de comunicación sináptica hasta perder por completo la realidad, e incluso el control de los esfínteres”, dijo.

Respecto al grupo “Jóvenes Guerreros del Amor”, que funciona como un centro de rehabilitación, Miranda dio a conocer que se trata de un programa de cuatro meses que ayuda a dejar de consumir cualquier tipo de drogas y que se enfoca en la atención humana, lúdica y personalizada de todos los anexados.

PRINCIPALES CONSUMIDORES

La distribución de la droga denominada “cristal” va en aumento desde hace cinco años en Xalapa y sus alrededores, donde los principales consumidores son jóvenes de 15 a 27 años de edad, que en pocos días generan una fuerte adicción, dijo Emiliano Rebolledo Velasco, integrante de la Comisión Interamericana para el Control del Abuso de Drogas (CICAD).

Entrevistado en las oficinas de Diario de Xalapa sostuvo que se trata de un derivado de tipo metanfetamina que se puede inyectar, lo que genera una fuerte dependencia entre los consumidores en muy poco tiempo.

Entre los consumidores que le ha tocado brindar ayuda, señaló, hay quienes dicen que empezaron con poco y que ahora no pueden dejarlo, al grado de que han recurrido al empeño y, en casos extremos, al autosecuestro, con tal de obtener recursos para adquirir esa droga.

A la fecha no se cuenta con estadísticas detalladas para saber la prevalencia en Xalapa, pues para ello se requieren poblaciones representativas y en esta región el consumo prácticamente apenas comienza a desarrollarse.

La problemática se desarrolla tanto en poblaciones urbanas como en comunidades y como ejemplo mencionó Teocelo, donde hay jóvenes con una adicción delicada al “cristal”.

Señaló que es necesario no pasar por alto esta situación, pues en Chihuahua tiene como 20 años que comenzó la distribución y consumo de “cristal” y ahora se tiene un gran problema de adicción entre jóvenes.

El consumo de ese tipo de droga puede generar una sensación de autoestima elevada, además de que quita el sueño y otorga una resistencia física extraordinaria, sin embargo, los daños a la salud son, entre otros, psicosis, alucinaciones, cambios en la estructura y función cerebral, déficit en el pensamiento y en las destrezas motrices, pérdida de memoria y comportamiento agresivo o violento.

En la entidad la red de investigaciones para darle seguimiento a todo lo relacionado con el “cristal” es muy pequeña, pues sólo se cuenta con pocos expertos en la materia que no han dejado de darle seguimiento.

LEGALIZACIÓN DE LA MARIHUANA, MALENTENDIDA

Con relación a la posible legalización de la marihuana para uso terapéutico, sostuvo que se trata de un tema malentendido y que por ello "en el país no se tiene la preparación para dar ese gran paso".

"En México ha sido mala la estrategia o limitada y deficiente, porque se ha dedicado solamente a la parte del control de la oferta, perseguir, castigar, encarcelar y quemar plantaciones".

Además, la información no ha sido bien comprendida entre la sociedad, pues a pesar de que la idea es la de atender enfermedades como las terminales, en las protestas para exigir su legalización suelen verse muchachos completamente sanos.

Al legalizar la marihuana no se debe descuidar su control y regulación, además de que no faltarán aquellos grupos delictivos que quieran controlar el mercado.

Según encuestas oficiales, durante los últimos 10 años ha bajado la edad de inicio en lo que se refiere al consumo de marihuana, además, anteriormente por cada 10 hombres había una mujer que la consumía y en la actualidad las estadísticas son 8 féminas por cada 10 varones, manifestó.

REACCIONES EN EL CUERPO

El consumo prolongado de la droga denominada “cristal” puede causar la disminución del volumen del cerebro, para dar paso a conductas agresivas, depresivas, alucinaciones o de plano la pérdida del espacio-tiempo de los adictos, advirtió Pedro Antonio Lara Ruiz, director del módulo de salud de El Castillo.

El “cristal” es una metanfetamina estimulante sumamente adictiva que afecta el sistema nervioso central. Se trata de un polvo blanco, cristalino, sin olor y con sabor amargo que se disuelve en agua o licor para facilitar su consumo.

Los daños a nivel cerebral por “cristal” son delicados, pues con el paso del tiempo puede haber un deterioro irremediable que dejaría incapacitados de por vida a quienes la consumen.

De manera inicial los efectos de la droga dan una sensación de euforia y de resistencia física extraordinaria, cuando en realidad se causan daños al cerebro y al sistema muscular.

Posteriormente se pueden padecer paranoias, alucinaciones y la pérdida de memoria, a causa de la disminución del volumen de la masa cerebral.

Los adictos a esta droga por lo regular son agresivos y violentos, sin omitir que pueden atravesar por trastornos depresivos severos con tendencias al suicidio. La pérdida de dientes y de peso por la falta de apetito es otra de sus consecuencias.

En el módulo de salud de El Castillo han sido atendidos pacientes con problemas de adicción al “cristal” y generalmente son jóvenes de 15 a 19 años de edad que son turnados al Centros de Integración Juvenil o casas Nueva Vida.

Difícilmente se puede tener un censo para saber cuántas personas son adictas, pues al igual que todos los drogadictos difícilmente se acercan a las instancias correspondientes para pedir ayuda, de acuerdo con el médico.

El consumo de este tipo de droga inició hace 10 años aproximadamente y ha ganado terreno importante ante la marihuana y la cocaína, que eran de las más consumidas, al igual que los inhalantes, puntualizó.