Cuando por beber se pierde trabajo, familia y hay desinterés por la vida es el momento de pedir ayuda. En Xalapa hay alrededor de 120 grupos de Alcohólicos Anónimos (AA) que ofrecen una opción para quienes buscan detener esta enfermedad que no tiene cura y es mortal por sus consecuencias.
En entrevista Andi Bob, quien padece este padecimiento, comenta que su experiencia de beber por más de 20 años, le permite ofrecer una alternativa sería para quienes quieren atenderse. En su caso, resalta que “nació” en 1993 cuando ingresó al grupo del Dr. Bob, lo que le permitió superar este mal, que por años le condujo a muchas experiencias negativas, entre ellas, la cárcel.
Lamentablemente, dice, quien tiene este problema con la bebida llega a robar y a cometer otros delitos en el afán de seguir con la adicción. “El problema es que muchos desconocen que es una enfermedad que hay que tratar”.
Expone que en AA se hace un gran esfuerzo. No hay cura y es mortal pero a través de la atención se puede lograr detenerla, a través de este programa y de compartir experiencias.
“Realmente AA es una agrupación que no exige asistencia, que no encierra, que no maltrata, no pide dinero, no da comida, pero que ayuda a quienes acuden en busca de ayuda”.
Remarca que AA es una comunidad de hombres y mujeres que comparten sus experiencias y esperanzas para superar su problema común. “Para pertenecer a AA lo único que se necesita es tener el deseo de dejar la bebida y por ello no está agrupado a ninguna secta, partido político, institución o iglesia, nos mantenemos con nuestros recursos y solo busca mantenernos sobrios y ayudar a otros a alcanzar su meta”.
Explica que sin duda diciembre es una temporada de alto riesgo para quienes padecen alcoholismo y que son tiempos en los que hay que atacar este mal como sociedad, hay que informar sobre sus efectos en la salud y vida de las personas.
Remarca que a los grupos de AA llegan jóvenes y adultos de todas las edades. Las mujeres llegan mucho menos, “porque es más complicado que pidan ayuda, pese a que las estadísticas oficiales muestran que hay más mujeres que padecen esta enfermedad. Les cuesta más trabajo pedir ayuda”.
Ahora y siempre ha existido la enfermedad del alcoholismo, “desde que se inventó el vino el hombre se enfermó, ahora es igual que antes. Los ricos se emborrachan y se pierden, pero se divierten, en cambio un pobre es un borracho perdido y pobretón, es lo mismo siempre”.
Como AA se busca informar a la sociedad y desmitificar la idea que tienen que es castigo, “somos grupos de puertas abiertas y las sesiones son de 90 minutos”.
Indicó que hay otros grupos, que utilizan el logo de AA, pero solo demeritan el trabajo que se hace en la central, “hay otropis esfuerzos y son respetables. En AA no solo se busca dejar de beber, sino de ser una mejor persona, de dejar de pensar que un borracho no tiene decencia”.