Xalapa, Ver.-El arzobispo de Xalapa, Jorge Carlos Patrón Wong, pide a los feligreses preparar su camino para la Navidad y alejarse de los caminos de la corrupción, la mentira, la violencia y la hipocresía.
Durante la homilía dominical señaló que cada uno de nosotros, como grupo, como personas, como familia y como nación debemos pensar si realmente hacemos algo para que las cosas cambien.
Te puede interesar: ¡Catedral de fiesta! Xalapa celebra a la Inmaculada Concepción de María
En el marco de las festividades a la virgen de Guadalupe, solicita a los fieles interceder ante la madre de Jesús para que la situación de inseguridad, de violencia, de odio y de rivalidad cambien.
“Cada persona debe enderezar sus caminos, lo que significa que se debe hacer desde lo individual, lo familiar y como pueblo. Se tiene que aceptar que hay caminos torcidos, la corrupción es un camino torcido, la violencia es un camino torcido, la mentira, la hipocresía es un camino torcido, no podemos continuar por esos caminos, tenemos que enderezar el camino”, dijo.
Señala que a veces no se observa que la honestidad y la justicia son valores a los que no se les da la importancia que se debe, ya que las personas valoran más los actos de corrupción o de mentira.
“A veces lo que está abajo es la honestidad y la justicia y lo que está alto es la corrupción, la mentira, la violencia, la hipocresía, por eso cada uno como pueblo debe enderezar su camino”, expone.
¡Suscríbete aquí a nuestro canal de YouTube! Conoce más sobre distintos reportajes
Destaca que muchas personas siguen siendo buenas y cuentan con grandes valores, por lo que desde lo individual se pueden lograr cambios en la sociedad.
“No podemos permitirnos creer que nosotros siempre vamos a estar sucios, sucios como personas, como familias, como sociedad, por eso está el mensaje de sumergirte en el río Jordán, bañarte, no podemos pensar que vamos a vivir sucios, no somos animalitos de la tierra, nos dejamos bañar, nos dejamos limpiar”, expresa.
Menciona que en el país y el estado hay muchas cosas que cambiar, sobre todo aquellas que han generado rivalidades, así como actos de violencia en varios sectores de la población.
Te puede interesar: Inicia temporada de Adviento, comerciantes llegan a la Catedral a vender coronas
“El único que redime es Jesús, la única acción nueva viene del Espíritu Santo, un espíritu político, un espíritu económico, de poder no es quien va a hacernos cambiar. En nuestra patria hay tantas cosas que debemos cambiar, nunca olvidemos que el centro de todo cambio es Jesús, entendemos que la Navidad es muy importante porque si no nace el nuevo Jesús vamos a continuar con las mismas acciones, hacemos un llamado a la reflexión, María nos dice que vayamos a Jesús, que nos arrepintamos y que busquemos cambiar nuestro corazón”, agrega.
¿Cuál es el llamado que hace el Arzobispo de Xalapa?
En el comunicado dominical, se recuerda que durante el tiempo de Adviento 2023 se debe renovar el deseo y el compromiso por transformar el entorno en que se vive y no acostumbrarse a la violencia ni se justifique la pobreza.
El vocero de la Arquidiócesis de Xalapa, Juan Beristaín de los Santos, indica que se necesitan de los profetas, hombres y mujeres ordinarios que, con su palabra y comportamiento recuerden que no podemos vivir resignados ante situaciones que anulen y borren el proyecto de Dios y la vida digna para todos.
“En este adviento 2023, debemos renovar el deseo y el compromiso por transformar el entorno en que vivimos. Conviene que no nos acostumbremos a la resignación ante la situación de violencia, ni que justifiquemos el empobrecimiento de muchos hermanos que viven con el salario mínimo, la exclusión y la injusticia”, expone.
Menciona que la llegada de Jesús, dijo, es buena noticia para los más pobres, pero también es buena noticia para los vivimos con algún tipo de enfermedad o vacío interior.
“La llegada de Jesús supone el anuncio convincente por parte de Juan de que la presencia mesiánica implica un deseo elemental y un compromiso real para que la vida de todos sea llevadera y existencia de todos sea más digna, sin costumbres opresoras y sin egoísmos que atenten contra la fraternidad”, manifiesta.
Además, pide a las personas tener un nuevo modo de entrar en relación con Dios que implique, a su vez, una nueva manera de relacionarse con los demás y con el entorno.