El exalcalde de Xalapa, Américo Zúñiga Martínez, aclaró que su administración concluyó sin tener observaciones de parte del Órgano de Fiscalización Superior (Orfis), por lo que en caso de quererlo señalar por presunto daño patrimonial por una obra del 2017 se reserva su derecho a actuar ante las autoridades correspondientes.
Este día se dio a conocer que el Orfis supuestamente presentó una denuncia en contra del Ayuntamiento de Xalapa por el presunto daño patrimonial de 2 millones 92 mil 127.93 correspondientes a la Cuenta Pública 2017, cuando Zúñiga Martínez estaba al frente de la administración municipal.
Ante ello, salió en su defensa y argumentó que se trata de un señalamiento viejo, “es una acción refriteada que ya tuvo su solventación al cien por ciento. Las Cuentas Públicas de la gestión en la que estuve al frente del gobierno municipal están solventadas, aprobadas y no tengo ningún tipo de preocupación al respecto”.
“Voy a mantener reservado mi derecho, claro que voy a defenderme, pero también defenderé mi honorabilidad y no voy a permitir que en tiempos particularmente difíciles como es la peor crisis sanitaria, económica, política por la que estamos atravesando, quieran politizar un tema tan viejo”, dijo.
Consideró que en caso de que existiera alguna anomalía, el gobierno municipal actual tendría que haber actuado conforme lo marca la Ley de Obra Pública.
“Yo creo que la actual administración si es que no solventó, si es que no ejecutó las fianzas que la Ley de Obra les obliga, si es que no llamó a cuentas a la constructora en su tiempo está teniendo una omisión que es grave. Me reservaré mi derecho a hacerlo patente ante las autoridades que hoy están recibiendo la supuesta denuncia de la que no he sido notificado”, expuso.
Recordó que su salida de la administración municipal fue hace tres años, por lo que no permitirá que se quiera manchar su nombre o el de sus colaboradores.
Explicó que se trata de una obra que se entregó en el 2017 y se relaciona con una barra de contención de la escuela Jaime Torres Bodet.
“Es una obra que sufrió un desplazamiento en su contención y por ello, después de que la entregué a finales del 2017 hubo todo un año, por la obligación de la autoridad municipal ya se a llamar a la empresa constructora a que la arregle o aplicar las fianzas que la propia Ley de Obra Pública menciona”, expresó.
En su defensa, manifestó que su administración fue calificada como una de la segunda más transparente a nivel nacional y en ningún momento se tuvieron problemas con las autoridades de fiscalización.
“Soy una persona que no tiene ningún problema en caminar por las calles de Xalapa, saludar al pueblo xalapeño y con la conciencia limpia, si quieren buscar algún tipo de corrupción en mí ni la van a encontrar, que se vayan a buscar a otro lado”, opinó.