El pasado 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres se llevaron a cabo marchas pacíficas en varios municipios del Estado, entre ellos Martínez de la Torre, Poza Rica, Orizaba, Huatusco, puerto de Veracruz y Xalapa.
Decenas de colectivos alzaron la voz una vez más en un recorrido que cambió de rumbo en más de una ocasión y el contingente no siguió la tradicional marcha en avenidas céntricas de la capital. Esto, al sentirse reprimidas por el extenso grupo de elementos policíacos -en su mayoría mujeres- "que más allá de resguardarlas parecía que buscaban evitar que destruyeran los inmuebles como habría pasado en manifestaciones anteriores", lo anterior, dicho por Daniela "N", una especialista en historia social y política, enfocadas en género y sexualidad, quien accedió a dar su testimonio a Diario de Xalapa sobre esta lucha social e independiente que las mujeres llevan a cabo.
Detalló que los colectivos de mujeres xalapeñas tienen una gran organización para sus recorridos, planeando principalmente una ruta que no sea del todo invasiva para evitar afectaciones a terceros, además señala que la formación que éstas adoptan tiene un significado que la sociedad desconoce en su mayoría.
"En la parte de enfrente (encabezando la marcha) van las mujeres que han perdido familiares y amigas víctimas de feminicidio o han sido afectadas directamente por la violencia de género en el estado de Veracruz", indicó.
Cuestionada sobre los problemas que se generan a la hora de realizar sus peticiones por la vía pública, con sus consignas y cantos, Daniela señaló que entre los grupos de mujeres no existen malos entendidos, por el contrario el apoyo está desde el primer instante en el que se agrupan en su punto de reunión, escuchando las indicaciones de las representantes quienes piden siempre mantener el orden.
"No tenemos ningún problema entre nosotras ya sea que asistamos como colectiva, activista u asistente. Nos protegemos entre todas, ya que consideramos que el principal peligro son las fuerzas policíacas o los alborotadores pagados por instituciones religiosas que insisten con crear disturbios que opacan el verdadero mensaje del movimiento feminista", dijo.
En contraste, Daniela menciona que su lucha es por todas las mujeres que temen levantar la voz, que sufren violencia verbal, agresiones en las calles, hostigamiento, acoso en redes sociales, entre otros, pues hoy día la sociedad sigue sin considerarlo violencia de género, temas que la Ley Olimpia ya castiga con cárcel, además de ser la voz de las que ya no están, las que se encuentran desaparecidas y por quienes no han tenido el valor de denunciar alguna agresión.
"Las pintas son una forma de protesta y de visibilización. Yo no te podría decir con total certeza qué proyectan las mujeres que las realizan, sin embargo, comprendo su enojo y decepción contra un estado que rechaza, humilla e ignora las denuncias y súplicas por justicia que ha sido negada".
Por lo general, las activistas y mujeres van realizando sus protestas con un objetivo, en esta ocasión, en el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer del pasado 25 de noviembre, expusieron sus denuncias públicamente a través de sus pintas sobre paredes de edificios de la Universidad Veracruzana, uno de los más afectados fue el de Radio UV.
Luego de la publicación de su marcha pacífica a través de redes sociales, Daniela indicó que al ver el batallón que se había reunido, muchas mujeres generaron especulaciones sobre las verdaderas intenciones de las autoridades al realizar ese operativo, pues en el pasado mes de septiembre denunciaron que los elementos las encapsularon evitando así que generaran afectaciones a los inmuebles de la zona centro de la ciudad.
"Se llegó a cambiar la ruta oficial, ya que en marchas anteriores, por ejemplo, la del 28 de septiembre de este año, hubo varios altercados y compañeras atacadas por policías, quienes armados empujaban y ejercían violencia física sobre todas nosotras, hay evidencia en video y denota la incongruencia de las fuerzas policíacas, porque cuando se solicita su apoyo en denuncias para violencia doméstica, por ejemplo, se tardan horas en llegar".
No hay vinculación con partidos
Ante esto, su llamado es para visibilizar la incógnita que existe sobre la violencia de género y luchar por la inclusión, principalmente hacerlo válido en nuestras leyes, dijo; todas las personas corremos peligro diariamente, sin embargo, "la mujer está expuesta, es exhibida y sigue siendo vista como el género débil, por ello tiene que parar esta situación".
De acuerdo con el Observatorio Universitario de violencias contra las Mujeres, de enero a octubre del presente año fueron recolectadas 461 agresiones, 239 desapariciones, 79 feminicidios y 74 homicidios, la activista señala que, "Uno de los principales problemas es la cantidad de feminicidios en Veracruz (primer lugar en el país en el 2019) y la nula o incompetente acción que llevan a cabo las autoridades. En segundo lugar, el aborto. Este debe ser garantizado por el Estado como un derecho, al ser regulado, se evita la muerte de mujeres en clínicas clandestinas".
Finalmente reconoció que no hay intromisión por parte de alguna autoridad política o dependencia que las "empuje" a realizar estas protestas.
"Las marchas son apartidistas, ninguna colectiva, activista o asistente está vinculada a ningún partido o candidato político, así como a ningún representante de gobierno o funcionario de nivel local, estatal o federal. Ningún medio de comunicación tradicional o legitimado por el Estado está vinculado al movimiento feminista".
FRASE
No tenemos ningún problema entre nosotras ya sea que asistamos como colectiva, activista u asistente. Nos protegemos entre todas
Daniela|Activista