Brujos de Catemaco y su misa negra en honor a Lucifer, rey de las tinieblas

El ritual celebrado en la región de Los Tuxtlas tiene más de 50 años de realizarse de manera ininterrumpida y debe ser precisa en cada uno de sus elementos

Miguel Salazar | Diario de Xalapa

  · viernes 6 de marzo de 2020

Foto: Alberto Delgado | Diario de Xalapa

Catemaco, Ver.- La magia y el misticismo se apoderan de Catemaco. Brujos y chamanes aprovechan la energía que fluye en este enigmático municipio para cargarse de energía y fortalecer sus poderes en vísperas del primer viernes de marzo.

Para ellos, lo más importante en esta fecha es llevar a cabo una misa negra, en honor al rey de las tinieblas: Lucifer.

Foto: Alberto Delgado | Diario de Xalapa

El ritual se debe realizar cada año la noche del primer jueves de marzo, pues según Enrique Marthen Berdón, "el Brujo Mayor" o "el Ahijado", es cuando se abren portales a otras dimensiones, a causa del también llamado viernes mágico y lleno de misterios.

La ceremonia es considerada como un ritual de culto a Satanás, a quien se le idolatra mientras suele recibir algunas ofrendas, incluidos los sacrificios de gallinas y chivos negros.

La misa negra en Catemaco, en la región de Los Tuxtlas, tiene más de 50 años de realizarse de manera ininterrumpida y debe ser precisa en cada uno de sus elementos. Su sede, desde hace 8 años, es el Centro de Rituales, en la colonia Paraiso 2, dijo en entrevista en ese lugar.

Al centro, en el piso, destaca un pentagrama o estrella de cinco picos, en representación del macho cabrio, imagen con la que también se identifica a Lucifer. Otro pentagrama también sobresale al fondo del escenario, donde debe ser envuelta en llamas, como símbolo de luz de las tinieblas.

Foto: Alberto Delgado | Diario de Xalapa

Otro elemento fundamental es la denominada Cruz Nazi. En la misa negra se utilizan dos, una con las puntas a la derecha, que representan los avances y logros en la vida, y otra con puntas a la izquierda, para representar el retroceso.

La cruz cristiana también es importante en el ritual. Debe ponerse de cabeza y significa la contraparte de la misa católica, señaló.

Los sacrificios de animales son una ofrenda o presente que se realiza a Lucifer, como agradecimiento a los favores concedidos.

Durante el ritual los brujos y chamanes deben vestir ropas negras o sus vestimentas tradicionales. También es común que durante la ceremonia se inicien nuevos brujos, decididos a servir a Satanás.