El cierre de negocios con mayor antigüedad en Xalapa sigue registrándose, siendo el último de ellos la farmacia Rex. Desde hace algunas semanas se informó a los clientes que la sucursal ubicada en la calle Revolución esquina con Abasolo, justo frente a la Plazuela del Carbón, dejaría de brindar el servicio.
Sin embargo, la sucursal ubicada en la calle Enriquez esquina con Carrillo Puerto continuará prestando sus servicios, según lo dado a conocer por los empleados. "Llevábamos muchos años, pero la situación económica no permitió continuar, mientras las ventas lo permitan seguiremos aquí, en esta sucursal", expusieron.
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El cierre de dicho comercio causó desconcierto en la población xalapeña, dado que se trata de una de las pocas farmacias en las que se ofrecen fórmulas especializadas y medicamentos preparados de forma artesanal. Frente a este negocio que cerró se encuentra la Farmacia Esperanza, la cual se especializa en productos de patente y fórmulas magistrales.
Los clientes pueden encontrar preparados químicos tradicionales, elaborados con recetas específicas. Aguas y lociones, cremas, aceites y bálsamos, esencias, fijadores para el cabello, jarabes, lanolina, pomadas, productos herbarios, tratamientos capilares, jabón de glicerina, vaselinas, ácido bórico, alcanfor, borex, bicarbonato, cloruro de magnesio, oxido de zinc, amoníaco y formol se encuentran entre los productos que ahí se pueden encontrar.
Más de 70 años de tradición
Por más de 70 años la farmacia Rex prestó sus servicios a la población. Su fundador, Robespierre Rosas Rodríguez, farmacéutico de vocación, adquirió y abrió a mediados del siglo pasado la primera de una serie de farmacias que después se denominarían Farmacias Unidas.
En sus inicios se exhibían en los aparadores lociones, cosméticos, jabones, talcos, artículos de belleza, desodorantes, cajas de pañuelos de papel y diferentes fórmulas.
Robespierre Rosas abrió una serie de farmacias para acercar al público los servicios, inicialmente en la droguería y farmacia La Fe, que se ubicaba frente a la iglesia de El Calvario, el cual era un establecimiento con repisas y anaqueles de madera y cristal.
Tras ello, apareció la farmacia San Martín en la esquina de Lucio casi frente a la bonetería Felmar, de don Samuel Chantres. Las farmacias Monte Carmelo en la calle de Altamirano y Hakim en la planta baja del edificio del mismo nombre en Xalapa, se abren dos más, una camino al Sumidero y otra en Ánimas. De todas ellas actualmente quedan sólo dos en Xalapa Reforma del centro y Farma que se ubica frente al Hospital Civil.