Veracruz, Ver.- Con frases como “la ropa sucia se lava en casa”, la violencia era un tema del que no se hablaba en familia pero que a lo largo de los años se ha logrado normalizar hablar del tema y que ha permitido una cultura de la denuncia, externó la vocera de la colectiva feminista Colmena Verde, Nancy Torres Castañeda.
En entrevista, consideró que el hablar de la violencia se está normalizando, justamente en todos los contextos y gracias a esto se han visibilizado los distintos tipos de violencia, sobre todo los que se presentan dentro del núcleo familiar.
- Te puede interesar: Perote y Xalapa, municipios más riesgosos para veracruzanas, esto dicen las cifras
“Muchas veces el silencio y el tema en las familias era algo que se suscitaba, como decían la ropa sucia se lava en casa y ahora se está tratando de cambiar eso, porque es importante visibilizar los tipos de violencia que vivimos en el primer núcleo que es la familia, no es algo que podemos negar, es el primer lazo”, externó.
Opinó que en muchas ocasiones los casos de violencia y feminicidios tienen que ver con el primer núcleo, que es la familia.
En ese sentido, afirmó que esto representa un avance porque anteriormente estos temas se veían de una forma asistencial a través de instancias como el DIF, cuando se trataba de temas de menores, violencia para conciliar.
Pero ahora con las leyes a una vida libre de violencia, ya se tiene tipificada la violencia, desde la psicológica, matrimonial, física, sexual y otras.
“La violencia hacía la mujer siempre ha existido, pero sí creemos que ha habido un avance en poder normalizar el hablar el tema de violencia, de violencia de género, hacía las infancias”, reiteró.
Mencionó que esta situación también se refleja en el número de denuncias, ya que actualmente hay registros de que ha aumentado la cultura de la denuncia en un 20 por ciento, es decir, ya las mujeres se atreven a denunciar a sus agresores.
“Justamente sí hemos notado una diferencia de un 20 por ciento de que ha aumentado la denuncia, las mujeres se han ido quitando la idea de que es una pérdida de tiempo”, expresó.
Reconoció que aunque los procesos son lentos, como colectiva feminista ha promovido rutas de acciones para que las mujeres conozcan de los procedimientos, desde donde poner las denuncias, las instancias que existen para que cuenten con orientación legal y psicológica.
“Sí ayuda mucho la cultura de la denuncia, que se empiece a generar de una forma más constante, porque al acudir el proceso burocrático se puede ir minimizando porque crean un protocolo de acción y que las mujeres sepan a dónde acudir, institutos, fiscalías especializadas”, puntualizó.
