Decenas de niños y niñas disfrutan este 30 de abril del parque de juegos infantiles "El Abuelo" que al mismo tiempo cumple 30 años de haber sido fundado por don Artemio Limón González de oficio herrero.
Don Artemio tiene más mil nietos y nietas, dice entre risas y con orgullo al poder ver a sus 85 años que los pequeños disfrutan de este espacio que ya consideran como suyo.
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"Para mí es una alegría tan grande haber llegado a 85 años y ver esto. Esto inició con la necesidad que tienen todas las colonias. Todas las colonias necesitan esto, pero no hay quien lo haga. Desgraciadamente y yo vivo aquí, esta es mi comunidad, debo servir a mi comunidad".
Así es como don Artemio recuerda los inicios de este lugar pues al tener de oficio la balconería, se dio a la tarea de elaborar columpios, resbaladillas, futbolitos, sube y baja y varios más.
Los juegos que realizó con ayuda de otros herreros alcanzan para que estén 150 niños activos, explica.
Desde el año que decidió trabajar en este parque, cada 30 de abril, un juego era un regalo como día del niño y así se equipó.
"Como se iba juntando el dinero de a poquito, pues por eso no se hizo todo al mismo tiempo. Y eso fue bueno porque le ha dado una fama a esta zona. Usted toma un coche de sitio, en cualquier lugar de aquí de Xalapa, y les dice, llévenme al parque de la Villahermosa. Ya no tiene que dar explicaciones. Derechito para acá".
"Soy el abuelo del barrio", dice orgulloso al explicar que ahora su trabajo es darle mantenimiento y cuidar ese lugar "a eso es lo que me he comprometido para que esto tenga vida".
¿Cómo ha logrado conservar el parque?
Y es que dice que ha sido gracias a las aportaciones de sus amigos que ese parque ha sido posible por lo que ha insistido en la necesidad de que quienes hacen uso del lugar lo cuiden porque es de beneficio para todos.
"Esto ha sido con amistades, mire por decirlo así. Yo con la reja, para hacer la reja de a poquito que se iba juntando el dinero, los amigos me decían ¿Qué estás haciendo? Pues ten tanto, ten tanto. Me tardé tres años para hacerla. Hacía yo cinco metros mensuales".
Este 30 de abril al festejo se sumaron estudiantes de Licenciatura en Estudios de Jazz de la Universidad Veracruzana (UV) quienes deleitaron a chicos y grandes, los nietos del abuelo.
