Desde su nacimiento Paz Miguel Hernández ha estado cerca de la herbolaria mexicana, lo que la llevó a tener conocimiento técnico y experimental de las plantas medicinales.
Hace por lo menos tres décadas es médica tradicional, actividad con la que ha logrado ayudar a personas de todas las edades, sobre todo de la comunidad Necoxtla, perteneciente a Ciudad Mendoza, municipio ubicado en la zona de las Altas Montañas, de donde es originaria.
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“Este conocimiento viene de mi mamá, de mi abuela, bisabuela, tatarabuela, desde antes de que existieran las ciudades las personas recurrían a las plantas medicinales para remediar sus males, yo nací en esto, crecí y estoy envejeciendo con las plantas”, dijo.
En entrevista, realizada en la USBI de Xalapa, lugar al que acudió para participar como expositora en el Congreso Latinoamericano de Plantas Medicinales, refirió que el conocimiento de las plantas medicinales viene de generaciones pasadas y ella la está transmitiendo a sus hijos y nietos.
Además, ha brindado sus conocimientos a investigadores y estudiantes, principalmente de la Universidad Veracruzana, quienes desean aprender sobre el uso, así como propiedades de la herbolaria.
“Les enseño porque no quiero que se pierda el conocimiento, como hay plantas que son curativas o de beneficio para la salud, hay otras que son dañinas para la salud, yo no puedo darle a las personas cualquier medicina, sino que debo saber bien cuál es su malestar y qué es lo que las está perjudicando”, expresó.
Aunque comenta que ninguna persona tiene el conocimiento completo del número de plantas medicinales que existen en el país, pero para ella es fácil identificar la gran mayoría de las que existen en la zona donde habita.
Para otorgar un tratamiento, las personas deben explicarle los síntomas que presentan, así como el tiempo que tienen con los mismos y las circunstancias o situaciones en las que son más frecuentes. Tras ello, brinda un diagnóstico junto con un tratamiento que puede incluir tés herbales, pomadas hechas a base de plantas medicinales e incluso masajes terapéuticos.
“Hay enfermedades para las cuales los médicos especialistas dicen que no hay cura, pero con la medicina natural las personas alcanzan un alivio, la confianza de las personas es porque han visto que logran un remedio”, expuso.
Hasta su vivienda, donde atiende, llegan pacientes de todas las edades, pues confían en las propiedades que tienen las plantas para atender determinados padecimientos.
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Desde una tos hasta un dolor de vientre o problemas crónicos atiende sin dudar en el beneficio que tendrán las personas que recibirán sus tratamientos, los cuales son económicos ante la situación económica en la que se encuentran las personas de la zona en donde se ubica.
En su opinión, lo importante es preservar los conocimientos y el uso de las plantas medicinales, así como ayudar a las personas con las “dolencias” que presenten. “Para uno que es médico tradicional lo más importante es que las personas obtengan un remedio a su enfermedad, las plantas son grandes aliadas si se utilizan adecuadamente y para buscar un bien, su uso debe ser adecuado porque se trata de materiales nobles, la naturaleza es así, es noble con quien la usa y la cuida, eso es lo que nosotros hacemos porque le tenemos respeto, pero sobre todo mucho cariño”, agregó.