Orizaba, Ver.- Lo que para muchos es basura, como las botellas de vidrio, para Elvira Cuasi Hernández es material útil al que le da otro uso. Al reciclarlo los convierte en vasos de diferentes tamaños y formas, así como en coloridas y vistosas lámparas o floreros.

La emprendedora encontró en el reciclaje de botellas una vía de autoempleo a partir del acopio y, la transformación de atractivas artesanías que ofrece a familiares, amigos y clientes.

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Elvira vende vasos tequileros que crea con el cuello de la botella, que encapsula y pule para que sean atractivos para los visitantes que admiran y compran los productos que elabora.

Hace también lámparas de los envases de cristal. Comienza reciclando la botella que después de lavarla y desinfectarla, la perfora, suelda las pantallas; todo el proceso es hecho a mano.

Relata que aprendió la técnica de vitro-mosaico. “Se cortan los vidrios que vamos pegando poco a poco para crear floreros, lámparas, además hacemos artesanías de plomo con vidrio de vitral, como figuras de cristal, fruteros y floreros”, explica.

“Sí al cliente le urge una lámpara de vitro-mosaico se la hacemos en cinco días, pero si no con calma la elaboramos en 15 días”, platica la entrevistada. Dice que de acuerdo al trabajo que se realice es el costo de la artesanía; son accesibles y al alcance de las familias.

¿Por qué el vidrio no se vende en centros de reciclaje?

El vidrio, a diferencia de otros residuos que la gente e industria tiran, no tiene valor en el mercado y, la mayoría de los centros de acopio y reciclaje no lo reciben. Al ser más pesado que el plástico, aluminio o papel, genera más trabajo al manejarlo y muy poca ganancia.

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“Para los artesanos que reciclamos tiene un valor agregado cuando se convierte en vaso, lámpara o frutero”, añade.

Elvira tiene un lugar en el Mercado de Artesanías, donde además ofrece a sus clientes productos en vidrio soplado, técnica que aprendió y con el que hace aretes y collares, que tienen aceptación entre los turistas”, apunta.

La creación de sus artesanías continúa al ser una empresa familiar en la que trabajan además de ella, su papá y hermana, además de que también expone y comercializa productos que, con esa misma técnica trabajan algunos amigos.

(Publicada originalmente en El Sol de Orizaba)