En Nautla en lo que va de la presente temporada de arribamiento de tortugas marinas, tan solo en la costa del pueblo ecoturístico El Raudal han sido protegidas y reintegradas a la naturaleza alrededor de 110 mil crías, de las especies Lora y Verde, dice Ricardo Yepez Gerón, director de la Fundación Yépez.
Lo anterior, señala, ha sido posible con el apoyo del personal altruista de la fundación que representa y de habitantes de El Raudal que se unen voluntariamente con el único afán de conservar y preservar a esos reptiles que se encuentran en peligro de extinción.
- Te puede interesar: Destrucción de áreas verdes provocará más inundaciones: Earth Mission
¿Turismo puede afectar el arribo y protección de tortugas?
El año pasado también se reintegró al mar una cantidad de quelonios similar a la de este 2022. Sin embargo, no se descarta que más adelante las labores de protección de nidos de tortugas marinas en playa se compliquen, pues las restricciones por Covid-19 han disminuido y con ellos se espera a que el número de visitantes en esas zonas vaya en aumento.
Además, también han sido localizados y puestos en áreas seguras algunos huevos de tortugas marinas de la especie Laud, la más grande del mundo, sin que alguno de ellos haya sido fértil. Los huevos estuvieron bajo estricta vigilancia y protección con la esperanza de que fecundaran; finalmente ni uno solo generó cría.
Al respecto, director de la fundación Yépez, señala que posiblemente se debe a que son muy pocas las especies de tortuga Laud en el mundo, además de que la inmensidad del océano impide que hembras y machos logren encontrarse.
Por otra parte, señala que también se ha logrado impartir jornadas de concientización a 4 mil 800 personas de manera presencial y en línea, sin omitir 80 campañas de limpieza, que permitieron recolectar alrededor de 6 toneladas de basura inorgánica y 10 de desechos maderables en zonas de playas y ríos.
Además, las jornadas de reforestación inteligente no han cesado y como parte de esas actividades han sido sembradas mil 800 plántulas de palma de coco tolerantes al virus del amarillamiento letal, con el apoyo de empresas socialmente responsables, estudiantes, universidades, organizaciones y voluntarios.
