Xalapa, Ver.- Claudia Yesenia es una joven trabajadora y entusiasta. A sus 22 años de edad se dedica a vulcanizar llantas y la labor la desempeña con orgullo, pues se trata de un oficio que le enseñaron su papá y su mamá, hace nueve años.
Además, estudia la carrera de medicina y se encuentra decidida a dar lo mejor para ser una gran cirujana. La joven pertenece a una familia que vive de las talachas, pues además de sus papás, sus dos hermanas, Lizbeth, de 15 y Rebeca, de 20 años, se dedican a esa actividad.
Dice que las mujeres han ganado un terreno importante para demostrar que pueden hacer lo mismo que los hombres sin dificultades.
La labor de talachera no ha sido fácil, pues en ocasiones le ha tocado desmontar llantas grandes y pesadas, "pero más vale maña que fuerza".
Además, en ocasiones no han faltado aquellos que le faltan al respeto o la ven con morbo; su papá y su mamá se han dado cuenta de la situación y deciden continuar con el trabajo que ella comenzó.
También ha sufrido discriminación, pues algunos clientes al verla piden que la talacha la haga su papá, quien luego de explicarles que tiene experiencia, aceptan, pero con desconfianza.
Claudia hace trabajos de calidad y no demuestra impedimento al desmontar ni al cargar llantas, además de que utiliza las herramientas y otros fierros para apoyarse, con una gran destreza; "más vale maña que fuerza", dijo con emoción.
Aquí, en la talachera, demostramos que se pueden hacer las cosas bien. Es maravilloso que vean que la mujer puede hacer lo mismo que los hombres. Me gusta formar parte de ese movimiento
El taller donde labora, junto con sus familiares, sobresale por la limpieza, pues dice que además de dedicarse a la vulcanizada, cada uno de los integrantes se turna la limpieza para que los clientes se sientan cómodos mientras esperan el desarrollo del trabajo.