La solidaridad se ha afianzado entre familias y vecinos en este tiempo de emergencia sanitaria. En muchos casos, se aprovecha la salida de alguno de ellos para hacer compras para todos y exponerse lo menos posible a los contagios por el Covid-19.
Ese es el caso de Ángeles, quien al vivir lejos del centro de la ciudad, se ha visto afectada por el cierre de algunos negocios pero ha buscado la oportunidad de ayudarse y ayudar a sus vecinos. “Con los vecinos, que son también familia, nos organizamos para traer cosas por sí uno va a salir y aprovechar el viaje porque estamos prácticamente aislados de la civilización. Porque además es difícil que los servicios de entrega lleguen, salvo la farmacia del Ahorro”, dijo.
Su esposo tiene una pastelería; sin embargo, la falta de productos y encarecimiento de otros, por la contingencia, también les ha causado problemas económicos aunque no han dejado de trabajar.
Algunos de nuestros proveedores han tenido que cerrar. Además el huevo y la mantequilla que han aumentado muchísimo. Y eso nos orilla a comprar menores cantidades en el súper pero a mayor precio.
Su pequeño hijo también ha tenido que adaptarse a los cambios pero han intentado seguir con sus actividades escolares lo más posible.
“En casa tenemos horarios para que mi hijo haga su tarea, le ponemos tiempo de recreo, tratamos de hacer las cosas de la escuela más o menos hasta su horario y ya en la tarde, hacemos ejercicios que le mandan sus maestros de Tae Kwon Do, para que más o menos esté activo", agregó.
Recuerda que hasta la semana pasada ella acudía al supermercado para comprar la despensa, aun sin tantas restricciones, salvo la de un cono de huevo por familia; sin embargo, ahora su esposo se hace cargo de ello.
“Esta semana le tocó a mi esposo ir a surtirla y procuramos comprar cosas, pero tampoco en exceso; lo que se puede lo compramos en Costco y en el súper y hay otras cosas que compramos en la tienda que hay acá en la colonia, vivimos lejos del centro y no es fácil salir, lo más cercano es la Central de Abasto o Pradera", detalló.
Ella cocina una vez a la semana y aprovecha para congelar y así tener para varios días, dado que las labores de su negocios y la atención a su hijo le imposibilitan hacerlo todos los días.
Incluso asegura que han aprovechado esta cuarentena para ir haciendo limpieza en casa e ir sacando cosas que tenían guardada sin razón.
“Mi esposo aún sigue trabajando porque es nuestra única fuente de ingresos, además que tenemos cuatro empleados, entre ellos una madre soltera, una chica casada con dos hijos, una señora de la tercera edad que vive sola y un chico que ayuda a sus papás en los gastos de la casa”, dijo.
A ello se suma que tengan que pagar renta, seguro, luz, agua, todos los servicios de sus establecimientos, además de los gastos de casa y la colegiatura. Por el trabajo, han implementado y reforzado algunas medidas de higiene para cuando su esposo regresa a casa y no exponer a nadie.
Muchas familias xalapeñas han adoptado así esta contingencia; con amor, con solidaridad, con fuerza y con la esperanza de que pronto, todo, regrese a la normalidad.
PIDE RESPETO PARA EL PERSONAL DE SALUD
La enfermera Dulce María Alarcón Carreto pidió respeto para el personal del Sector Salud, tras sostener que a causa de la pandemia por el Covid-19 diariamente trabaja sin descanso para procurar el bienestar de los pacientes.
Lamentable que en otras entidades se hayan dado casos de agresiones en contra de médicos y enfermeras, a quienes les han arrojado cloro y negado el servicio de transporte público, entre otros actos de discriminación, por considerarlos como potencialmente infectantes, consideró
Fue muy insistente al señalar que los médicos y enfermeras que luchan contra el coronavirus deben ser valorados, pues se trata de personal que en lugar de llevar a cabo el aislamiento en sus hogares tiene que exponerse todos los días para atender a los pacientes sospechosos y confirmados por Covid-19, sin omitir a los de otras enfermedades.
En entrevista, se dijo orgullosa de su labor, pues aunque solamente la desarrolla por temporadas y con base en contratos, siempre lo ha ejercido con amor.
Al hablar de la cuarentena, manifestó que el aislamiento preventivo debe ser respetado, porque por medio de esa estrategia se evita la propagación del coronavirus.
"Mientras menos se salga y se sigan las recomendaciones se podrá mitigar el problema, además de que con ello volveremos a realizar nuestras actividades acostumbradas más adelante", indicó. Además de la enfermería, desde hace más de 12 años realiza ventas de joyería, zapatos y lencería por catálogo para fortalecer la economía del hogar.
Con información de Miguel Salazar | Diario de Xalapa
CONFINAMIENTO HA MODIFICADO HÁBITOS DE CONVIVENCIA
VERACRUZ, Ver.- María del Carmen Hernández dejó de ver a sus amigas desde hace un mes, con las que acostumbraba a reunirse una vez por semana para ponerse al día mientras se tomaba un café.
La emergencia sanitaria por coronavirus la mantiene encerrada en casa, saliendo únicamente para realizar trámites, pero regresando de inmediato a su domicilio para evitar cualquier contagio. Para ella, lo peor del Covid-19 son las afectaciones en cuanto a la convivencia, ya que el aislamiento en casa es la principal recomendación para evitar ser contagiada de la enfermedad que ha cobrado la muerte de varias personas en el estado de Veracruz.
Me ha limitado convivir con mis amigas que teníamos el hábito de salir cada quince días con mis amigas por el cafecito, en eso sí me ha afectado en la convivencia.
María del Carmen relata que no es de las personas que acostumbra a salir mucho de casa, por lo que al inicio pensó que mantenerse en cuarentena no le afectaría tanto. Sin embargo, el ver las noticias en la televisión, dice que las cifras de enfermos le genera estrés.
“Yo trato de reanimarme, pero también uno anda viendo a ver a qué hora ya podemos salir, me choca estar oyendo las noticias, llega un momento en el que me harto porque eso me hace estresarme más”, reconoce la maestra jubilada.
Con información de Danytza Flores | Diario de Xalapa