ASTACINGA, Ver.- Desde su casa, donde convalece de las heridas de bala que recibió y en medio de un despliegue de elementos de seguridad, el presidente municipal, Antonio Ramírez Itehua, gobierna y atiende a su municipio.
Sin acceso a ninguna persona, sólo de su esposa Jésica Itehua Reyes, la autoridad municipal emite indicaciones sobre el trabajo que debe realizarse de acuerdo con el programa previsto para este 2019.
El ayuntamiento se encuentra trabajando de manera normal y, hasta el momento, ninguna persona está ocupando el puesto del presidente municipal, por lo que se sigue descartando la posesión de la síndica única.
De los acontecimientos, el síndico único del ayuntamiento, Patricia Tentzohua Techuacatl, reconoció que los hechos violentos registrados en contra de la primera autoridad generaron incertidumbre, pero no sólo en este municipio sino en toda la sierra de Zongolica.
En cuanto a la posibilidad de que ella asumiera la presidencia municipal en forma interina, mientras que el alcalde alcanzara la recuperación total de su salud, dijo que todos los funcionarios del Ayuntamiento están trabajando en su área, pero sin descuidar la presidencia.
Declaró que durante los hechos lamentables que le pasó al alcalde, en el Ayuntamiento trabajaron normalmente, aunque existía el temor de que se pudiera presentar alguna contingencia.
A un costado del palacio municipal se puede observar la presencia de elementos de Seguridad Pública y de la Fuerza Civil, quienes hacen algunos recorridos en las carreteras para detectar alguna irregularidad.
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