Coacoatzintla, Ver.- La lucha es todos los días para las mujeres que trabajan para ayudar al sostenimiento del hogar y los hijos, explica Francisca Quevedo García, quien elabora todos los días chilatole, atole y tamales para todos los gustos: camarón, puerco, pollo, queso y elote de chile y dulce para venderlos.
En su estufa de leña, ubicada a escasos dos metros de la carretera, tiene su pequeño negocio de comida de la región para venderlo a quienes viajan por esta vía todos los días. Ella vive en Casa Blanca, municipio de Coacoatzintla.
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Comenta que mientras su esposo sale a trabajar ella se queda en su hogar, ubicado a la orilla de la carretera, para laborar los alimentos que vende en su negocio, a veces la apoyan sus pequeños hijos, “pero todo lo hago yo sola, porque me gusta ayudar a mejorar la economía de mi hogar”.
Resalta que hacer tamales y chileatole es una práctica común en su comunidad, “desde pequeñas aprendemos a valernos por nosotras mismas y, por ello, nos apoyamos preparándose y se venden a quienes pasan.
Indica que la fama de su buena comida la precede. También ofrece chicharrones preparados para quienes no quieren comer o elotes asados, “porque por esta zona se cultivan”.
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Resalta que si es complicado atender su negocio y darles la atención necesaria a sus pequeños, “pero ellos saben que el trabajo es en beneficio de todos así que también vienen a ayudar a servir o pasarme los ingredientes”.
Comenta que todos los días hace tamales, “porque se venden bien y a las personas les gusta que son cocinados en leña, a la forma tradicional y eso siempre atrae más clientes.
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En estos días han estado regulares y aunque le perjudica que suba masa, aceite, azúcar y las hojas para tamal, “pero hay que seguir trabajando y pues no se le puede subir el precio a cada rato a los clientes así que pues tendrá que ganar un poco menos”.
Se benefician mucho de las familias que suban a visitar Naolinco y aunque coman allá, “muchos prefieren comprar los tamales aquí porque son deliciosos”.
¿En cuánto vende los tamales?
Explica que todos los tamales tienen un costo de 15 pesos sin importar los ingredientes. “Porque así los clientes llegan más”.
En esta comunidad, dice se acostumbra mucho hacer de camarón, situación que no es común, “pero son deliciosos y a muchos clientes les gustan por eso pasan a comprarlos de forma regular.
A 20 pesos los elotes y esquites preparados, “son un poco más caros porque llevan queso y crema”.
Resalta que las ventas, obvio, son mejores durante el fin de semana, pero durante la semana van saliendo. No es lo mismo, pero siempre llegan clientes que pasan de viaje, porque saben que son muy buenos los que preparo en casa.