Xalapa, Ver.- Veracruz no cuenta ni con las condiciones ni con los edificios necesarios para las oficinas centrales de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), opina Ramsés Galicia, secretario general de la sección 55 del Sindicato de la Semarnat.
Luego de la manifestación realizada el pasado 17, explica que descentralizar la dependencia significa que la entidad albergue a 2 mil 300 personas, desde este mes o el siguiente.
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Menciona que las oficinas estarían ubicadas en el puerto de Veracruz, no obstante, no hay nada confirmado de manera oficial.
Esa incertidumbre genera psicosis en los trabajadores al tener que enfrentar el cambio de un estado a otro, cuando desde 2021 que se supo del traslado no se les dijo cuáles son sus derechos o qué les van a dar, detalla.
A la expectativa de qué viene para los trabajadores y sus familias se suman otros problemas como lograr basificaciones y la entrega de equipamiento de protección, el cual se frenó desde hace dos años.
Explica que tras el paro nacional, este viernes 21 de enero habrá una reunión de trabajo en la cual la Conagua presentará el proyecto integral del proceso de descentralización del traslado a Veracruz.
Adelanta que se abordarán los alcances del mismo, a partir de lo cual se establecerá un calendario para la realización de las mesas de trabajo. Hasta el momento, dice que solo hay compromisos.
Y es que la Conagua ya se comprometió a entregar el reporte del estado que guardan la ropa y el equipo de trabajo no ha entregados, así como otorgarlos en el trascurso del mes de febrero.
Otra de las promesas es que la Comisión autorizará nombramientos y cubrirá pagos pendientes, además de hacer las gestiones ante la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para la basificación de 50 trabajadores en este año.
Aclara que en total, son 300 los trabajadores que están como eventuales, aun cuando la mayoría ya cuenta con 12 o 13 años de antigüedad; las basificaciones, precisa, se suspendieron en 2018.
Finalmente anuncia que estarán pendientes del cumplimiento de los compromisos y, sobre todo, de velar por los derechos de los trabajadores ante la posible movilidad.
