Nogales, Ver.- En bicicleta o a pie y sin importar las condiciones meteorológicas que se presenten a lo largo del camino, miles de peregrinos provenientes del sureste del país pasan por la zona de las Altas Montañas para llegar a la Basílica de Guadalupe en vísperas de su fiesta el 12 de diciembre.
Todos tienen una manda en especial o un agradecimiento que hacer por el favor recibido. Dos ciclistas de Escárcega, Campeche, pedalean desde hace 6 días para llegar este domingo al Santuario de la Virgen Morena, a pedir salud para su familia y también empleo.
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André y Andrés, dos jóvenes campechanos, uno moto taxistas y el otro ingeniero hidráulico viajan en bicis de montaña; en su mochila llevan esperanza y fe. Van a dar gracias a la Virgen por los favores recibidos a lo largo del año.
Sus ropas lucen sucias por el polvo, su mirada cansada, su espalda adolorida por no dormir bien y dolor en las piernas por pedalear sus bicicletas por 800 kilómetros.
¿Dónde descansan los peregrinos en Orizaba?
Mientras descansan en los escalones de la Parroquia de San Juan Bautista, a un costado del Palacio Municipal, cuentan que el sábado pasado dejaron la comodidad de sus hogares para cumplir una manda de agradecimiento a la Virgen de Guadalupe. Ayer llegaron a Córdoba y hoy pasaron a la iglesia de este municipio.
En las bicis habilitaron unas cajas para llevar dos llantas de refacción, por si se ponchan en el camino; cargan lámparas y sus tenis, ya que usan chanclas para pedalear, porque dicen es más cómodo.
El clima y los automovilistas que no los respetan son sus principales riesgos. Viajan juntos. Llevan años pedaleando sus bicicletas, al llegar noviembre, como parte de la promesa que mantienen con la Virgen del Tepeyac.
Al duro recorrido en bicicleta se suman los riesgos a los que pueden enfrentarse por las lluvias y el frío, pues ello complica manejar adecuadamente la unidad de dos ruedas y corren riesgo de caer.
Ya conocen la ruta, por lo que calculan los días de pedaleo, así como los de descanso. Buscan siempre una parroquia o un albergue donde descansar, refrescarse y otra vez montarse en la bici para continuar.
¿Cuál es la ruta de los peregrinos?
Cruzaron Tabasco, Veracruz y se enfilan a Puebla para continuar su recorrido hasta llegar a la Ciudad de México.
“Pedaleamos con fe. Es una manda la que hicimos para pedir salud por la familia, y lo más importante, agradecer a la Virgen de Guadalupe porque todos están bien y no falta nada en el hogar".
Los que recorren son mil 400 kilómetros, desde Escárcega, en Campeche hasta la Ciudad de México, a la que esperan llegar el domingo por la tarde-noche. Ahí descansarán dos días y comienzan el recorrido de vuelta a casa.
“Otra vez a pedalear la bicicleta, pero ahora llevando en la espalda, una imagen de la Virgen de Guadalupe, de 1 metro y medio para tenerla en su hogar o en la iglesia".
Señalan que, gracias a Dios, no han sufrido ningún accidente o percance a lo largo del viaje. Es tan grande su fe, que, aunque sienten dolor no dejan de pedalear y avanzar hasta llegar a su destino.
“Es una promesa a la Virgen la que estamos cumpliendo, lo hacemos con fe y pues alegría. Aunque es cansado en cada parada tomamos fuerza y seguimos”, dicen.
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Apuntaron que mientras Dios les dé vida peregrinarán cada año a la Basílica, pues hacerlo les provoca felicidad y una emoción “porque le estamos cumpliendo una promesa a la Virgen de Guadalupe”.
(Publicada originalmente en El Sol de Orizaba)