De algunos años a la fecha es común observar innumerables rehiletes en los panteones xalapeños. Si bien, la colocación de estos juguetes artesanales comenzó en el panteón Bosques del Recuerdo se ha extendido a todos los camposantos de la ciudad.
A unos días de la celebración de Días de Muertos, en la mayoría de los comercios donde se venden flores, velas y coronas, ahora tampoco pueden faltar los rehiletes. Hay además vendedores ambulantes que han empezado a ofrecer un impresionante surtido de estos juguetes que se colocan en las tumbas para que con el viento les de vida y les pinte de colores.
Lo cierto es que en esta celebración de Todos Santos y Día de Muertos son cada vez más las personas que junto a las flores de cempasúchil, nube y mano de León, colocan uno de estos juguetes donde sus aspas de plástico o cartulina se mueven con el aire.
Antonia León Domínguez, es una xalapeña que gusta comprar un rehilete para la tumba de su hermano, comenta que al ser un juguete “creo que es algo que a mi hermano le hubiera gustado, por eso siempre le traemos uno en estos días. Además la tumba se ve alegre, porque los colores le dan vida”.
Hace ya varios años, explica que busca los rehiletes más alegres y coloridos para alegrar el sepulcro infantil. “Y pues al no ser caros es una buena opción para mostrar nuestro cariño a nuestro hermano que falleció hace un tiempo”.
En negocios de flores de la calle Rébsamen y en los instalados cerca de los cementerios Bosques de Xalapa, Bosques del recuerdo y Xalapeño, hay una gran variedad de estos juguetes.
SE POPULARIZARON
Itzel Abad García quien vende una gran variedad de rehiletes en su comercio de flores comenta que los traen de distintas entidades del país. “De hecho vienen de la Ciudad de México, Puebla y Guadalajara”.
Dice que principalmente los elaboran en pueblos porque están considerados una artesanía.
Cuando se comenzaron a popularizar para colocarlos en el panteón eran pequeños, los normales, pero conforme avanzaron los años empezaron a ganar los grandes y entre más llamativos, pues mucho mejor.
Es más, ahora los más populares son los que tienen los colores del equipo del fallecido, “los tenemos de Chivas, Cruz Azul y América”, son los que más se venden”.
Indica que hay cierto afán de colocar en la tumba de su familiar el rehilete más bonito y más grande.
“Nosotros tenemos uno de tamaño jumbo que es de más de un metro y tiene un costo de 700 pesos, pero también los hay desde 50 hasta esa cifra, depende del gusto de quien lo compra, pero también tiene que ver con el familiar fallecido. Compran el que consideran va con su personalidad”.
Otro de los más llevados es el de color negro, que colocan en las tumbas cuando acaba de fallecer porque es una señal de luto.
Indica que en su caso compran los rehiletes sencillos y ya ellos los adornan de acuerdo a como lo pide el cliente, “se les pueden colocar flores artificiales o figuras de moda que hacemos aquí. Porque las familias suelen pedir distintos adornos de acuerdo a la temporada o a su fallecido”.
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Recuerda que los rehiletes seguramente se han hecho populares porque como pueden clavar la base en la tumba permanecen ahí un tiempo y sus aspas se mueven conforme corre el viento, “para las familias es importante darle vida a los panteones y a las tumbas porque siempre se piensa que es para disfrute de nuestro difunto”, dice.