Cuando pensamos en un río imaginamos un amplio cauce cristalino de agua fresca, peces que se ven a simple vista, niños jugando, árboles, incluso el sonido de las aves.
Para quienes habitan cerca del río Sedeño la imagen es diferente: un afluente a ratos gris o café, en trayectos con una nata espumosa que acarrea basura y desechos; mal olor que llega a la pestilencia en meses de calor; un sitio en el abandono, un tiradero clandestino.
Sus aguas, que antes abastecían a Xalapa, Banderilla, Emiliano Zapata y Tlalnelhuayocan, hoy no sólo son nocivas para consumo humano, sino que incluso nadar en ellas es un riesgo grave a la salud. El río Sedeño se ha convertido en un río de muerte.
Pese a que desde 2005 se creó el Consejo de Coordinación Intermunicipal para el Rescate y Sustentabilidad de la Cuenca del Río Sedeño, conformado por los municipios de Acajete, Banderilla, Rafael Lucio, San Andrés Tlalnelhuayocan y Xalapa, la coordinación no ha logrado los frutos deseados y a 13 años el Sedeño se encuentra prácticamente contaminado al 100% en su parte media y baja.
Pese a la situación, originada por los desechos vertidos por fábricas y las aguas negras que hogares vierten directamente en el afluente, sólo hay— de acuerdo con la Conagua—una Planta de Tratamiento de Aguas Residuales que beneficia al Sedeño, la “Quetzalapan-Sedeño”, inaugurada en 2012 con inversión del gobierno federal de 16.25 millones de pesos y 8.75 millones del gobierno estatal, pero gestionada desde 2006.
La planta, proyectada con 20 años de vida útil, vendría a liberar hasta un 80% al Sedeño de la contaminación por las descargas de aguas negras, sin embargo desde hace tres años su funcionamiento es de alrededor del 50%, al faltar colectores para incorporar mayor caudal.
Veracruz cuenta con 189 Plantas de Tratamiento de Aguas Residuales, de las cuales nueve están fuera de operación y seis fueron dadas de baja.
Para salvar al río, cultura ambiental
“El Sedeño es uno de los afluentes con mayor caudal que cruza Xalapa y vive una situación muy difícil por la contaminación, pese a que ha habido esfuerzos de diversas instancias para su rescate, no ha sido posible lograrlo”, indicó Eric Juárez Balladares, regidor comisionado de CMAS del ayuntamiento de Xalapa.
Agregó que uno de los principales motivos de contaminación es el crecimiento desordenado de la mancha urbana, que ha llegado a invadir las márgenes de los ríos, en este caso del Sedeño.
Las personas de manera natural al no tener el servicio de drenaje vierten sus descargas en los ríos y esto es un problema que estamos viviendo en todos nuestros afluentes; puedo asegurar que el 100% de los cuerpos de agua en Xalapa tienen algún tipo de contaminación Eric Juárez Balladares
Desde el ayuntamiento se tiene contemplado emprender una serie de acciones para rescatar los afluentes, desde buscar que las familias cuenten con drenaje, hasta brigadas de limpieza y jornadas de educación ambiental.
De entrada, indicó que para el río Sedeño se invertirán alrededor de 2 millones de pesos este año, además de emprender acciones conjuntas con municipios vecinos que lleven a que la planta de tratamiento de Banderilla opere al 100%, que la población deje de tirar basura y sus aguas negras en el cauce, entre otras.
“Es importante concientizar a las personas y llegar a que ellos mismos sean los que cuiden el río, ayuden a sanearlo y se sientan orgullosos de tener un río cristalino que pasa frente a su casa”, finalizó el regidor.
