El dirigente estatal del PRI, Marlon Ramírez Marín, reconoció que el proceso electoral actual es uno de los más violentos que se ha registrado en la entidad.
Al ser cuestionado sobre la situación de violencia que se vive en varios puntos de la entidad, el dirigente del partido tricolor consideró que se le debe preguntar al Gobierno del Estado dónde quedó la promesa de devolver la paz y la tranquilidad a Veracruz.
"Al inicio de la administración se hizo la promesa de devolver la paz y estabilidad al estado en dos años, lo cual no ha sido posible", expuso.
Recordó que, además, se firmó el Acuerdo Veracruz por la Democracia 2021, con el cual se hizo el compromiso de garantizar la seguridad a los candidatos y votantes, hecho que no se ha logrado.
"Nosotros lo que pedimos es que exista congruencia y que se garantice la seguridad para todos los que participan en estas elecciones", dijo.
Entrevistado en el centro de Xalapa señaló que la persecución política en contra de los candidatos de la alianza Veracruz Va se ha generado ante el temor que tiene la oposición de perder.
"El clima de persecución política, que hoy mismo un periódico de circulación nacional lo retoma, sobre está situación que se está dando desde el Gobierno del Estado hacia los candidatos y candidatas de la alianza", manifestó.
Al respecto, mencionó que en todo el estado se tienen campañas fuertes de hombres y mujeres, "a todos los opositores se les ha venido persiguiendo, a nosotros lo que nos ocupa es que se de en un clima y en un Gobierno que por muchos años pidieron el respeto a las minorías y persecución política".
Finalmente, comentó que en el ambiente político-electoral lo que demanda el ciudadano es congruencia entre las acciones de la administración estatal y lo que se dice.
"Los candidatos y candidatas nos permiten tener la claridad de que si hoy fueran las elecciones tanto en la local como la federal ganaríamos la mayoría de las Cámaras y presidencias municipales, pero debemos ser mesurados", agregó.