Alvarado, Ver.- Desde las 5:00 horas un grupo de 50 mujeres comienza un trabajo que a simple vista parece fácil, pero no lo es. Pelar camarones conlleva un esfuerzo físico, en el que la destreza juega un papel importante para ganar más dinero.
A unos pasos de la laguna de Alvarado, se encuentra la fábrica de empacado de camarón de criadero de la empresa Majo´s, misma que da empleo a personas del municipio. La mayoría son mujeres, mientras los pocos hombres que laboran ahí, se dedican a otras actividades.
Para disponerse a trabajar cada quien porta mandil y botas de plástico largas, así como malla de rayón colocada en la cabeza para detener el cabello.
¿Cómo es el trabajo para las mujeres de la fábrica de empacado de camarón de Alvarado, Veracruz?
Amairani Enríquez González es una de las mujeres más audaces para pelar camarón, sin dejar de trabajar, y con los dedos visiblemente lacerados, explicó el procedimiento que junto a sus compañeras y compañeros realizan en una jornada laboral, misma que termina hasta concluir con el último marisco pelado.
“El proceso de pelado es quitarle una concha que trae la pulpa del camarón, al quitarle la conchita ya está listo para comer”. Sin embargo, el trabajo no comienza ahí. Ya que antes de pelarlo, el camarón proveniente principalmente de criaderos de Chiapas debe pasar por el proceso de vaciado en pailas para cocer.
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Alberto Hernández es uno de los pocos hombres que tiene como tarea cocer el camarón en grandes pailas, a las que se les añade cal, ingrediente aliado en el cultivo de este marisco, cuyo objetivo es desinfectar. Por cada tonelada de camarón, agregan cuatro kilos de cal.
“No lo pesamos, pero le echamos como 30 kilos (de camarón) a la cacerola, lo cocemos en dos minutos 20, dependiendo del tamaño del camarón, a veces lo dejamos hasta tres minutos”, refirió el trabajador, mientras movía con una pala los camarones para que no se pegaran.
Ayudado de otro hombre, desmontan una gran cacerola, a la que inmediatamente pasan a los dados con agua fría y añade hielo, para posteriormente pasar al proceso de pelado en las mesas de trabajo, donde ya se encuentran las mujeres listas para trabajar.
Una vez que las trabajadoras concentran una importante cantidad de camarón pelado, éste lo pesan para anotar cuánto lograron pelar en esa ronda. Antes de empacarlo nuevamente en sus cajas, lo ponen en tarjas preparadas con agua fría y sal para que tengan un mejor sabor.
“Ya después de la sal, aquí los muchachos se encargan de pesarlas por kilo, después las meten en taras (contenedores de plástico) y finalmente son transportadas a restaurantes, van a Cancún, a Campeche, a diferentes lados”, relató Amairani.
Previamente a ser empaquetados, se ponen en cámaras de enfriamiento para congelarlos antes de transportarlos.
Este trabajo, aunque dignifica y beneficia a las personas de la cabecera municipal y comunidades de Alvarado, no es el soñado, pero al carecer de fuentes de empleo acordes a otros perfiles, los habitantes deben entrarle a lo que haya, para lograr subsistir.
“Yo para hacerme un kilo tardo menos de 10 minutos, porque yo pelo duro, rápido, porque ya tengo como 10 años trabajando en esto. Sí me gusta, pero a la vez no, a veces uno viene porque Alvarado carece de trabajo y aquí se gana bien”.
¿Cuánto es lo que ganan por una jornada laboral?
A cada mujer trabajadora, por cada kilo pelado, se hacen acreedoras a siete pesos, “he llegado a hacerme hasta 113 kilos en una jornada, cuando hay poco, lo menos que he hecho son 50 o 48 kilos al día, hay personas que se ganan poquito, 200 o 300, porque pelan lento”.
Entre todas las trabajadoras han llegado a pelar hasta cuatro toneladas diarias de camarón de criadero, por lo que 50 pares de manos, en ocasiones llegan a ser insuficientes para sacar el trabajo, y que el camarón llegue hasta los platillos, tales como ensaladas, cocteles y ceviches.
Simón Carmona Herrera, empleado encargado de la empresa envasadora, explicó que cada día se pelan tres toneladas de camarón de criadero, mismo que se vende empaquetado en presentación de un kilo, con valor de 220 pesos.
Esta envasadora de marisco también elabora fortuitamente camarón botalón y pulpo, logrando empaquetar hasta tres toneladas en un día, así como un aproximado de 200 kilos de filete de pescado por día ocasionalmente, lo que permite la generación de empleos entre la misma comunidad.
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