ACAJETE, Ver.- La crisis no deja a los ganaderos dedicado a la producción de leche en Acajete y Rafael Lucio. El litro se lo pagan a no más de cinco pesos y en ocasiones no les da ni para comprar alimento para sus reses.
Jesús Carmona Carmona se dedica exclusivamente a la producción y venta de leche. Diariamente vende 200 litros entre esos dos municipios y asegura que sus ingresos no son mayores a los mil pesos.
Para alimentar su ganado por día tiene que comprar cuatro bultos de alimento y cuatro pacas; la inversión es de casi mil pesos, asegura.
Cuando realiza buenas ventas a la semana le quedan cerca de 500 pesos, que su esposa tiene que estirar para el gasto del hogar y la escuela de su hija, que va a la primaria. Cuando le pega la crisis se ve en la necesidad de vender una que otra vaca y distribuir el dinero que obtiene para pagar deudas y satisfacer las necesidades más apremiantes.
En Acajete la actividad ganadera tampoco es halagadora y en este lugar los vaqueros lamentan que los consumidores prefieran comprar leche de caja o de polvo en tiendas, en lugar de apoyar la economía local.
El litro de leche bronca es mucho más barato en comparación de la distribuida por grandes cadenas comerciales. “Nosotros la damos en cinco pesos, más barata que las otras leches que son de 14 y 19 pesos por litro, además de que esas vienen rebajadas”, dijo el ganadero Silvino Hernández.
Durante años los lecheros han estado en la espera de un repunte en el precio del lácteo; sin embargo, con el paso de los años lo único que han obtenido es una mayor dificultad de producción y precios más bajos.
Los productores desconocen los programas de apoyo para el campo del estado y de los ayuntamientos, pues dicen que son gestionados por las direcciones municipales Desarrollo Agropecuario y que les piden muchos papeles y documentos para empezar a solicitarlos.