Xalapa, Ver.- En poco más de un mes, la amenaza del Covid-19, enfermedad respiratoria aguda causada por un nuevo coronavirus SARS-CoV2, ha cambiado de manera drástica la vida de millones de veracruzanos. Con 112 casos positivos, seis defunciones y 466 sospechosos, en Veracruz la enfermedad es hoy una realidad que ha provocado que miles de familias permanezcan en sus casas y que las actividades económicas hayan disminuido de manera dramática.
Las grandes avenidas de ciudades como Xalapa, Veracruz, Boca del Río, Coatzacoalcos, Orizaba, Córdoba o Poza Rica lucen semivacías y cientos de ayuntamientos han aplicado medidas que van desde las suspensiones de labores y el cierre de algunos negocios, hasta el bloqueo total de sus fronteras o la vigilancia policiaca en playas y sitios públicos.
El Covid-19 ha cambiado también la forma de convivencia de millones de veracruzanos. Acostumbrados al contacto físico y al saludo amistoso, desde el anuncio de la Jornada Nacional de la Sana Distancia quedaron prohibidos los saludos de mano, beso o abrazo, por lo que estas manifestaciones afectivas ya no se ven tan fácilmente en las calles.
Desde el pasado 20 de marzo, millones de estudiantes de todos los niveles educativos suspendieron sus clases presenciales y se encuentran hoy en sus casas aprendiendo a través de varias plataformas digitales, con las que se comunican con profesores y compañeros o repasando con sus libros de texto ayudados, en el mejor de los casos, por sus padres, familiares o cuidadores.
La actividad económica también sufrió modificaciones, de manera general, miles de negocios han ido cerrando de manera obligatoria o voluntaria, incluso modificando sus horarios y dinámicas con el fin de mantener la sana distancia en sus comercios y sucursales.
En Xalapa, desde el sábado 21 se decretó el cierre de antros, cervecerías, cantinas y bares en la ciudad y se determinó la reducción de 30% de mesas en establecimientos de comida, quienes fueron obligados a cumplir con las indicaciones sanitarias. Sin embargo, la afluencia de xalapeños fue disminuyendo en el centro de la ciudad y las plazas comerciales, negocios de diversos giros han ido cerrando sus puertas de manera temporal. Los restaurantes han impulsado el servicio a domicilio mediante motos, taxis, aplicaciones e incluso puesto a su mismo personal a repartir para mantener los empleos.
VERACRUZANOS NO LO CREÍAN
Aunque la enfermedad conocida mundialmente como Covid-19 apareció por primera vez desde el 17 de noviembre de 2019 en China, en México el primer caso positivo de este virus fue confirmado el 27 de febrero pasado. 20 días después, el 18 de marzo de 2020, se confirmó la primera víctima mortal del virus, un hombre de 41 años.
Aunque ya había llegado a México, a finales de febrero la alerta mundial por el brote de coronavirus sonaba "a algo lejano" para la población. En esa fecha, Diario de Xalapa documentó el sentir de algunos xalapeños, quienes expresaron que tenían más miedo al dengue o la influenza que a “esa enfermedad china”. En esas mismas fechas, voces señalaban que el sistema de salud en Veracruz no estaba preparado para atender una epidemia mundial como el coronavirus, ya que incluso existía en su momento desabasto de medicamentos para enfermedades como el cáncer o el VIH. “No quiero ni imaginar lo que pasaría en materia de salud en caso de que enfrente nuestro país algo como el coronavirus (…) No estamos preparados para algo de esa magnitud”, señaló Marco Antonio Rodríguez Juárez, integrante de la Red Nacional de Abogados Ciudadanos.
Sin embargo, 15 días después, el 13 de marzo la emergencia por el nuevo coronavirus empezó de manera oficial en Veracruz, cuando autoridades de la Secretaría de Salud (SS) anunciaron que habían sido analizados 10 casos sospechosos de Covid-19, de los cuales siete resultaron negativos y los tres restantes están bajo análisis. Fue a partir de ese momento que, en el comunicado técnico de la Secretaría de Salud federal, a través de la vocería oficial del Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológicos (InDRE), se situó a la entidad en color amarillo, por sospecha de casos.
El 18 de marzo pasado, Dulce María Espejo Guevara, jefa del Departamento de Vigilancia Epidemiológica de Veracruz de los Servicios de Salud de Veracruz, confirmó los dos primeros casos positivos de Covid-19 en Veracruz, una mujer de 22 años de edad y un hombre de 24, quienes ya están en confinamiento para evitar la propagación de la enfermedad. Dos días después, el número de contagiados se duplicó y pasó a 4.
Para el 20 de marzo eran ya 7 los casos positivos en la entidad y esta cifra se mantuvo estable durante varios días hasta el 26 de marzo, cuando se volvió a duplicar la cifra llegando a 14 casos en los municipios de Boca del Río, Veracruz, Ixtaczoquitlán y Coatzacoalcos. Al día siguiente, el 27 de marzo, el reporte de la Secretaría de Salud dio cuenta de 19 casos, entre los que se incluyó ya un caso positivo en Xalapa, el primero para la capital del estado.
El pasado 29 de marzo, se dio a conocer el primer fallecimiento por Covid-19 en Veracruz. La muerte ocurrió en el municipio de Tlacotalpan y se trató de un hombre de 53 años de edad. Días después, el 3 de abril, se sumó una muerte más, la de un hombre en el municipio de Emiliano Zapata y el 4 de abril se contabiliza un nuevo fallecimiento, esta vez de una mujer en Poza Rica, Veracruz.
El 10 de abril pasado, con 63 casos positivos a Covid-19 en Veracruz, Espejo Guevara anuncia que de acuerdo con las estimaciones de la Secretaría de Salud, por cada caso positivo del virus en Veracruz podría haber de entre 8 a 10 infectados, por lo que el número podría en ese momento rebasaba los 500 casos.
Dos días después, el 12 de abril, el secretario de Salud en Veracruz, Roberto Ramos Alor, informó que, por primera vez desde el inicio de la emergencia, el número de casos positivos en la entidad aumentó en más de una decena, pasando de 68 a 79 el número de veracruzanos confirmados mediante la prueba de laboratorio. Hasta ese momento habían 480 casos más en investigación en 67 municipios del estado y el 66% de los contagios ya eran comunitarios.
El pasado miércoles 15 de abril, Veracruz rebasó la centena de contagiados, las autoridades de la Secretaría de Salud de la entidad dieron a conocer 106 casos y seis defunciones en los municipios de Tlacotalpan, Emiliano Zapata, Alvarado, Coatzacoalcos, Poza Rica y Veracruz. Ese día, el director de los Servicios de Salud de Veracruz (SESVER), Roberto Ramos Alor, anunció el arranque de la campaña “Aplanemos la curva”, que busca disminuir el número de casos.
Hasta ayer jueves 16 de abril, el número de casos positivos en Veracruz eran 112 casos positivos y se mantenían las 6 defunciones, sin embargo, la Federación ubica ya a la entidad con el color amarillo, lo que equivale a que los casos confirmados con prueba de laboratorio ya superan la centena.
