Las calles del centro de la ciudad lucen con poca gente. Bares y restaurantes están abiertos a esta hora de la mañana. La razón: el partido de la selección mexicana contra Corea del Sur en el mundial de futbol.
En la plaza Lerdo se ha congregado un grupo de aficionados que esperan ansiosos ver a México ganador de este partido y ¿por qué no?, también del mundial.
Con playeras de la Selección, hombres, mujeres y niños se han reunido en sus casas, en las plazas, en restaurantes y bares de su preferencia para apoyar a sus jugadores.