Orizaba, Ver.- Vecinos del fraccionamiento Tulipanes, ubicado en el norte de la ciudad, manifestaron su indignación por el actuar de una habitante de ese lugar, quien dice coloca pan con veneno en los parques de la unidad habitacional, así como en un solar que colinda con su propiedad, para matar perros y gatos, por lo que piden sanciones.
En voz de Iveth Muñoz Cruz, señalaron que la inconformidad fue puesta del conocimiento de las autoridades municipales. “La señora lo dijo vía internet, que si ella había puesto el veneno; inclusive los policías tienen grabado un reporte en su grabadora en donde ella reconoce que puso el veneno en la vía pública”, aseveró.
Dijeron que el pan con veneno lo tiró en los jardines que están frente a uno de los dos jardines de niños que hay en ese fraccionamiento.
Mi esposo, su servidora y otras personas nos encargamos de recoger todo ese tipo de alimentos. Al ir hablando con los demás vecinos, la molestia que teníamos por este suceso, es que en mi calle nos empezamos a dar cuenta que no solamente era un perro, sino que los vecinos del fraccionamiento habían encontrado muertas a sus mascotas en su azotea, en su casa y en la banqueta. Van cinco perros, 11 gatos y un tlacuache, que está en extinción
La indignación y molestia es de todos los habitantes de ese complejo por la crueldad con la que la señora mata a los animales. Destacó que ya había un antecedente de esa persona, pues había dado veneno a un perro en el hocico aun cuando la mascota estaba en su casa. “Desgraciadamente la casa donde vivía la perra es de rejas y tiene espacio. Los vecinos vieron cómo le dio el veneno, corrieron a ayudarla, a auxiliarla y la salvaron; eso fue hace cuatro meses”, dijeron.
Apuntó que al dueño de la mascota envenenada lo amenazaron, lo que provocó mayor molestia y presentaron la queja al municipio y a la Unidad de Manejo Ambiental (UMA), donde les dijeron que no hay un reglamento de protección animal, ni una fiscalía que tenga un perito veterinario para este tipo de asesinatos.
“Queremos que esto sirva para hacer justicia. Ahorita fueron animales, pero, ¿qué tal si hubiera sido un ser humano? Hay indigentes que pasan ahí, teporochitos que bajan por ahí. Hay gente humilde que se sienta en los jardines del municipio a comer. ¿Se imagina que alguien hubiera tomado ese desperdicio?, no se vale”, aseveró.
Pidieron al presidente municipal que se apruebe el reglamento que, se enteraron, propone el regidor quinto y exigen que se aplique la justicia.
