Examen de ingreso a la UV es descontextualizado y estandarizado: investigador

El investigador Gunther Dietz, miembro de la Academia Mexicana de Ciencias, expone que dicho examen debe ser diversificado

Maribel Sánchez / Diario de Xalapa

  · domingo 11 de agosto de 2024

Se pronunció por planes y programas de estudio que partan inductivamente de las problemáticas y de las regiones / Foto: Jesús Escamiroza / Diario de Xalapa

El investigador Gunther Dietz, miembro de la Academia Mexicana de Ciencias, critica que para el ingreso, la Universidad Veracruzana (UV) aplique un examen generalizado, estandarizado y descontextualizado que prolonga las desigualdades, sobre todo para hablantes de lenguas indígenas.

Para garantizar el derecho a la educación superior no se debe optar por este tipo de exámenes, indica para luego subrayar que “el ingreso hay que democratizarlo y diversificarlo”.

“No estoy hablando de cuotas sino de una diversificación de la entrada que reconozca que no es lo mismo salir de la ‘Prepa Juárez’ que del telebachillerato semiperiférico”.

¿Por qué el examen de admisión de la UV debería diversificarse?

La diversificación, añade, se debe dar por justicia social y educativa pero también por calidad: “No puedo trabajar con puros egresados de la ‘Prepa juárez’, necesito esa experiencia de vida de quien se ha socializado en el contexto de la telesecundaria y telebachillerato”.

Evidencia de investigación educativa de la misma UV indica que el examen no garantiza la selección de los más adecuados y tampoco tiene capacidad de predicción de éxito o de fracaso académico, expresa.

“Colegas de la UV lo han demostrado con mucho análisis estadístico, entonces, ¿por qué lo hacemos? Por flojera. Es lo menos caro y lo más fácil aplicar un examen y dejar no sé a cuántos miles fuera para ‘rankear’ a los que entran”, declara.

En el foro “Educación intercultural para todas y todos. Diversidad cultural e inclusión”, en la Unidad de Servicios Bibliotecarios y de Información de Xalapa, también señaló la compra del examen en mercado que, opina, resulta “medio mafioso cómo se ha estructurado”.

La diversificación, añade, se debe dar por justicia social y educativa pero también por calidad / Foto: Jesús Escamiroza / Diario de Xalapa

Las declaraciones del antropólogo y educador, miembro del Sistema Nacional de Investigadores, se dan en el contexto de algunos de los puntos que, considera, deben ser tomados en cuenta para avanzar en la interculturalidad en las universidades en general.

A partir de la experiencia del acompañamiento a la Universidad Veracruzana Intercultural (UV-I), ejemplifica que sí aplica el EXANI con fines diagnósticos, pero dedica mucho más tiempo y esfuerzo para recorrer telebachilleratos y tener reuniones con padres de familia, pues en muchos contextos, un estudiante de 17-18 años no es quien toma la decisión; la familia toma decisiones colectivas.

“La UV-I ya tiene esa expertís, que nos imparta talleres para que lo hagamos en otras carreras, porque las otras carreras pagan ese precio, la tasa de deserción después de primer o segundo semestre”.

Un estudiante que deserta no es solo una pérdida estadística, es otro incumplimiento más de nuestro mandato constitucional, añadió.

Considera que deben ser tomados en cuenta para avanzar en la interculturalidad en las universidades en general / Foto: Jesús Escamiroza / Diario de Xalapa

Sin importar el nombre, sostuvo que una universidad necesita lograr una planta estudiantil diversificada, pues al tener grupos social y económicamente tan homogéneos se complejiza el trabajo de la interculturalidad.

Compartió venir de un país donde hay un sistema general con entradas específicas y hoy en día están pensando cómo cambiar el ingreso porque se han dado cuenta de la ausencia de estudiantes a la Facultad de Medicina con interés por querer trabajar fuera de un laboratorio de alta especialización.

“En el conjunto de la Alemania rural faltan médicos y profesores, médicos que quieran estar en el medio rural, claro, porque eso como universidad es lo que se produce. Allí se produce esa injusticia”, enfatizó.

Diversificar carreras

Otro de las recomendaciones es diversificar carreras y repensar qué son los planes de estudio para carreras pertinentes, pues se deja de lado el egreso y un mercado laboral desconocido.

“Las tasas de desempleo de pedagogos no son mucho mejores o peores que las de gestores culturales. Tenemos que pensar hacia dónde formamos. Está quedando claro que las carreras disciplinares son útiles para reproducir la academia pero no solo estamos formando para la academia”, dijo.

Otro de las recomendaciones es diversificar carreras  y repensar qué son los planes de estudio para carreras pertinentes | Foto: Ricardo Martínez / Diario de Xalapa

Se pronunció por planes y programas de estudio que partan inductivamente de las problemáticas y de las regiones.

Titulación

En su amplia intervención ahondó también en la necesidad de nuevas formas y formatos de titulación, en lo cual ya tienen experiencia la UVI y las facultades de artes.

“Que nos enseñen al resto de la UV nuevos formatos de titulación, documentos recepcionales que vayan más allá del corsé aburrido de la tesis de licenciatura de pregado… No tiene un impacto, necesitamos formatos y forma de titulación que ya sean parte de tu recorrido profesional. El trampolín para…”.

Considera que lo que la UVI hace con tesis en lenguas originarias, en formatos artísticos, performativos o audiovisuales son clave para el futuro.

Entre otras sugerencias, se refirió a la normalización lingüística que se está impulsando en algunas sedes: “Por sus contextos tiene que dejar de ser una característica únicamente, necesitamos pensar programas plurilingües en todas las carreras, incluyendo las ingenierías, ciencias de salud, etc.”

Reiteró que hay una tradición institucional eurocentrada que se ha ido especializando en la exclusión de personas | Foto: René Corrales | Diario de Xalapa

Gunther Dietz remarcó que en la universidad en general no se logrará construir conocimientos equitativos si se sigue excluyendo a grandes partes de la población.

Reiteró que hay una tradición institucional eurocentrada que se ha ido especializando en la exclusión de personas, de cuerpos, de mentes, de trayectorias y memorias de la educación superior.

Jóvenes autoadscritos como indígenas en educación superior relatan cómo la universidad les ha cambiado su proyecto de vida, hay transformaciones identitarias que ven como positivas porque les han permitido una perspectiva de futuro, pero en otras universidades viven una doble soledad, narró.

Y es que, sostuvo, les cuesta encontrar un lugar en ese mundo de vida y porque se enfrentan a la discriminación.

“En muchos casos de escuelas muy metropolitanas o privadas se conjuntan el racismo, clasismo y sexismo. Es importante tener en cuenta que esa experiencia marca al estudiante de origen rural indígena primera generación. Las universidades perpetúan que las élites sigan siendo clasistas y racistas, porque los estudiantes de élite sí van a ser mañana la élite del país”.

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