El traspaso de los recursos de las cuentas inactivas de las Afores al Fondo de Pensiones para el Bienestar, el cual se financiará en parte con el ahorro de cuentas inactivas es un tema que sigue generando polémica y comentarios enfrentados.
Mientras que para la asesora legal del Barzón, Teresa Carbajal Vázquez, la acción es lamentable y un crimen el que se quiten los ahorros de años a los trabajadores adultos mayores, para el doctor Darío Fabián Hernández González, del Instituto de Investigaciones y Estudios Superiores Económicos y Sociales (IIESES) de la Universidad Veracruzana, hay muchos mitos, pero lo primordial es que antes de poner los recursos en un fondo hay que informar de quiénes son para que puedan acceder a su dinero.
Además, Arturo Bocardo Valle, catedrático y exdirector de la Facultad de Economía de la Universidad Veracruzana, expresa que no hay razón de cambiar un sistema que funciona como es el caso del sistema de administración de los fondos para el retiro.
Es un robo
Al respecto, Teresa Carbajal Vázquez explicó que desde El Barzón se considera que toda acción que pretenda quitar sus derechos y recursos a personas en una edad avanzada es un robo y un retroceso.
Agrega que aunque se ha explicado que la iniciativa solo aplicaría para quienes no han reclamado sus recursos, “sin embargo, desde la experiencia se sabe que hay casos de trabajadores enfermos, u otros que por carecer de un abogado no han podido hacer el reclamo de su Afore. Son muchos los factores los que inciden en que un adulto mayor no haya recibido su dinero”.
Teresa Carbajal remarca que sí de verdad se quiere ayudar a las personas a tener una pensión digna, hay que hacer eficiente el otorgamiento de los recursos a quiénes no los hayan reclamado. "Hacer este fondo es un botín político para continuar despojando al pueblo de las instituciones que hasta la fecha sí han funcionado como son las Afores”.
Resalta que en su opinión están haciendo un remate de bienes al querer quitar hasta lo último a las personas, lo que en materia de derechos humanos implica dejar en la indefensión a las personas.
Mitos sobre el tema
El economista Darío Fabián Hernández González, integrante del del Instituto de Investigaciones y Estudios Superiores Económicos y Sociales (IIESES) de la Universidad Veracruzana resalta que la Comisión Nacional de Ahorro para el Retiro (Consar), informa que hay casi 19 millones de cuentas de derechohabientes que no han sido reclamadas hasta el año 2023.
De esas, agrega, alrededor de 10 millones pertenecen a trabajadores que no estaban al tanto de que su cuenta estaba registrada, otro tanto, casi 9 millones tienen fondos que no han sido operados ni trabajados y que están inactivos. Todo esto con montos extraordinarios.
Indica que los datos revelan la mayor parte de estas 19 millones de cuentas que no son reclamadas tienen que ver con el tema de que no tiene el conocimiento básico para saber que tienen derechos a estos derechos.
“Estos recursos son importantísimos. Es vital una reforma porque entre el 40 y 45 por ciento de lo que genera con el sistema actual un jubilado es lo que se le otorga al final de su vida laboral, las pensiones no le regresan la totalidad porque las Afores tienen fallas porque no se invierten, sino que se deprecian por no invertirlo”.
Resalta que hay numerosos mitos sobre el tema de los fondos de pensiones. “No se van a expropiar los recursos. En mi opinión la reforma debería incluir que a las personas que tienen recursos se les llame para que tengan acceso a ellos. Antes de transferir los recursos debería de informar a quienes corresponda que tienen ese dinero. Es lo justo”, concluyó.
No hay razón de cambios
Por su parte, Arturo Bocardo Valle, catedrático de la Facultad de Economía y exdirector de la misma, expresa que no hay razón de cambiar un sistema que funciona como es el sistema de administración de los fondos para el retiro.
Resalta que no hay necesidad del cambio. “Como economista no puedo ver otra razón más que el gobierno busca la forma de financiar la falta de recursos para sus programas”.
El argumento de que se tendrían más beneficios en el Fondo del Bienestar, pero no hay un diagnóstico que demuestre que hay algo malo con las Afores. “No hay una razón para cambiar algo que funciona bien”.
Mejor que el gobierno federal arregle el sistema de salud, que funciona mal o la inseguridad en el país, que son temas prioritarios y que requieren solución.
Precisa que este tema es totalmente electorero y busca aparentar ayudar a los trabajadores, “si el asunto es mejorar el sistema de pensiones tampoco es un solución para la mayoría de los trabajadores. Así que no veo razón para este cambio, a menos que lo que se busque es un efecto en las próximas elecciones”, concluyó.