Con relación al fallecimiento de una persona, en una clínica subrogada del Instituto Mexicano del Seguro Social, el IMSS emitió el siguiente comunicado:
• El señor Roberto “N” presentó un paro cardiorrespiratorio mientras se encontraba recibiendo tratamiento en la citada clínica.
• Fue asistido con respiración cardiopulmonar avanzada por un médico nefrólogo de la unidad de hemodialisis de dicha clínica, sin respuesta a la misma, declarando su fallecimiento.
• El paciente era un masculino de 65 años de edad con antecedente de insuficiencia renal crónica de larga evolución, inicialmente en diálisis peritoneal y desde hace 5 años en hemodiálisis con múltiples accesos vasculares con diagnóstico de trombo intracavitario manejado con anticoagulación, con deterioro clínico progresivo.
• Durante el evento de reanimación se presentó pérdida súbita de la corriente eléctrica, que de forma intermitente condicionaba que la planta de emergencia entrara y saliera.
• Las fallas en la energía eléctrica no alteraron ni interrumpieron la reanimación cardiopulmonar en el paciente.
• La variación de la corriente eléctrica no afecta el funcionamiento del equipo de hemodiálisis, éste cuenta con 30 minutos de batería ininterrumpida.
• El fallecimiento de Roberto "N" no es atribuible al suministro eléctrico.
• Es pertinente señalar, que en la clínica Gifyt, se atienden de forma subrogada 409 pacientes de la UMAE del IMSS, con tres sesiones por semana, cada una con duración de tres horas.