Efectivamente, habrá mejores cifras económicas para México en el tercer trimestre del año y en 2024, porque se trata de un año electoral y el gobierno federal invertirá lo necesario para terminar las grandes obras sexenales, sin embargo, esto se hará dejando un fuerte endeudamiento, “porque todo tiene un costo”, explica Arturo Bocardo Valle, investigador y profesor de la Facultad de Economía de la UV.
Sobre las cifras positivas de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que elevó las expectativas de crecimiento para México en 2023 y 2024, remarca que seguramente será así, pero no repercutirá todavía a nivel familiar.
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¿Por qué se invierte más al final del sexenio?
Arturo Bocardo remarca que definitivamente hay una recuperación en el cierre del último trimestre del año que seguramente se prolongará el próximo por ser año electoral. Agrega que viene entonces una tremenda inversión del gobierno federal. “Va a ver muchísimo dinero. Van a finalizar los proyectos como Dos Bocas y el Tren Maya, pero será a costa de un endeudamiento tremendo. Detrás de este crecimiento hay endeudamiento”, dijo.
La nueva previsión de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, señala que se va a quedar todo terminado y eso hace que haya una expectativa de crecimiento, pero será a costa de un endeudamiento a partir del año 2025 y será muy fuerte.
En ese sentido, el economista apunta que la apuesta que hace el presidente Andrés Manuel López Obrador es lograr un mayor crecimiento y terminar las obras con mayor inversión, porque Claudia Sheinbaum tiene que empezar su recorrido y cosechar los beneficios de las inversiones.
El catedrático de la Universidad Veracruzana explica que este cierre de año con mayor inversión es bueno, pero no todo es con financiamiento proveniente de las captaciones internas, sino que hay un paquete económico que deja serias dudas sobre la capacidad de endeudamiento del país.
Arturo Bocardo remarca que es previsible que los mercados internacionales vayan mejorando para el cierre de año y el próximo. “Es decir habrá crecimiento, pero la consecuencia será un endeudamiento para el año que viene”.
Cuestionado sobre si este crecimiento traerá beneficios a nivel familiar, opina que seguramente no será así o si llegan no serán a largo plazo.
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En lo que respecta al empleo, dijo que habrá un crecimiento lento en los primeros seis meses del año y ya se empezarán a ver mayores oportunidades con las inversiones que traerán aparejadas los proyectos que deberán estar terminados, para los siguientes años.
Un ejemplo son los aeropuertos. “Mientras que se beneficia a uno se desfavorece a otro, pero podría haber más empleo con las nuevas vías de comunicación e infraestructura que requerirá el Felipe Ángeles y esa es la apuesta para este año, pero considero no se verá una mejoría en los hogares a corto plazo".